Jim Carrey era el único que podía ser la máscara

Nos hacemos la peli con esta comedia exitosa icónica de los 90. En este panorama Jim Carrey es el actor del momento porque nos regaló grandes momentos, tal vez el personaje más excéntrico intérprete con sus dotes gestuales locos y las muecas más exuberantes de la historia.

Lo que más resalta de Styanley Ipkiss el protagonista de La máscara es esa tez verde y sus enormes dientes blancos. El detalle de que la dentadura falsa debía ser utilizada solo en escenas sin diálogo, pero el gran Jim Carrey aprendió a hablar con ella puesta, para darle un aire aún más loco a su peculiar personaje.

Stanley era un empleado de banca pasado de amable, resulta algo estúpido cuando tiene que enfrentarse a alguien. Tras uno de los peores días de su vida, Stanley encuentra una máscara que representa a Loki, un dios de la malicia y la travesura y se la coloca, conviertiéndose en una persona completamente diferente.

Los bailes y los gestos de Carrey conformaron el mítico personaje del film en el que Cameron Diaz era su amada inalcanzable. Pero es de remarcar que nadie como Jim podría haber establecido este film en la retina de nuestra memoria audiovisual con tal maestría.