"Wish: el poder de los deseos" Una visión de las metáforas en las animaciones de Disney

Para empezar, hablemos de la película en sí misma. "Wish: el poder de los deseos" forma parte de un catálogo de cuentos de hadas de princesas de Disney que mantienen los estándares establecidos. Sin embargo, la animación alcanzó un nivel ligeramente superior al de "Raya y el último dragón" y "Encanto", por ejemplo.

Una característica fundamental de las historias de princesas de Disney es el sólido significado cultural que conllevan. Este enfoque inteligentemente da nueva vida al género. De lo contrario, volver a contar historias similares a "Blancanieves y los siete enanitos", que contiene la esencia de los cuentos de hadas de los hermanos Grimm sobre princesas y príncipes, resultaría aburrido después de algunas versiones. Así, la infusión de elementos culturalmente diversos se convierte en la vibrante fachada de estos cuentos de hadas sobre princesas.

En 1937, Walt Disney Animation Studios estrenó el primer largometraje de animación, "Blancanieves y los siete enanitos", por el que Walt Disney recibió un Oscar junto con siete estatuillas de enanos.

"Blancanieves y los siete enanitos" jugó un papel crucial para Disney desde el punto de vista financiero y artístico. Esta película obtuvo varios premios Oscar por sus contribuciones. Así, Disney siempre está incluyendo novedades en sus animaciones sobre princesas y presentando diferentes elementos como disfraces, bailes, gastronomía típica, estilos de lucha, arquetipos de personajes e incluso estilos de vida. De esta manera, el público puede presenciar pastelitos y té junto a burritos mexicanos, el sonido de la gaita mezclado con ritmos electrónicos y el baile flamenco entrelazado con faldas de paja.

"Valiente"

"Valiente" se encuentra en una situación incómoda. Su linaje no cuenta con la pureza típica de Disney, que es evidente en su estilo visual, ya que se originó en Pixar, no en Disney Animation Studios. Esta película presenta un estilo cultural en los primeros diez minutos, con vestimenta y ardiente baile flamenco, insinuando la esencia de la Península Ibérica. Sin embargo, los creadores pasan por alto por completo la frescura cultural durante los noventa minutos restantes, reduciendo la película a una historia de venganza corriente y sin atributos distintivos.


Otra tendencia en las películas de princesas de Disney es su mayor sensibilidad hacia Hollywood y la corrección política de Estados Unidos. A partir de “Blancanieves y los siete enanitos” de 1937, a lo largo de sesenta años, aunque Disney introdujo elementos culturales vibrantes, la construcción de personajes, particularmente de princesas, se mantuvo dentro del paradigma de princesa + príncipe.

"Mulan"

Con el despertar del feminismo en la década de 1990, con "Mulan" como ejemplo en 1998, surgió un cambio más pronunciado hacia la narración centrada en las mujeres. Algunos de los indicadores claros fueron el protagonismo absoluto de la protagonista femenina principal, un menor énfasis en los temas románticos, la concesión de una voluntad más fuerte y un mayor poder a la princesa. "Mulan" fue la primera animación de Disney en introducir el concepto de familia.


En “Valiente” (2012) el aspecto romántico quedó prácticamente abandonado y casi no hay protagonistas masculinos. En cambio, el núcleo emocional pasó de temas románticos a temas de familia ("Valiente", "Frozen" y "Encanto") y amistad ("Raya y el último dragón", "Moana" y "Ralph el demoledor").


"Wish" puede verse como la película que elimina casi por completo la trama romántica. En animaciones anteriores, normalmente había un personaje u objeto que llevaba la conexión emocional de amor, amistad o familia para la princesa, pero esta película carece de esa presencia.

El núcleo de la película, la estrella, aunque personificada, se enfrenta a dificultades al ser un personaje sin líneas. Es un desafío para un personaje mudo soportar el peso emocional necesario para la trama, provocando una ruptura en el recorrido sentimental de la historia. La incapacidad de la estrella para hablar afecta significativamente su posición e importancia dentro de la película.


Audazmente, Disney dio el primer paso en el desarrollo del personaje al retratar a Pocahontas (1995) como una princesa indígena originaria de los Estados Unidos. Aunque "Aladdin" presentó a Jasmine, ella permaneció en la esfera cultural de Occidente.


Después de Pocahontas, Disney comenzó a crear princesas de diferentes orígenes culturales y raciales. Con la creciente influencia de la corrección política de Hollywood en el nuevo siglo, el impacto de la etnicidad y la cultura en las películas se ha expandido más allá del protagonista. Esta película lleva esa idea a un nivel superior. La protagonista, Aisha, es una chica morena que viste trajes típicos españoles. Bastante políticamente correcto. Como siempre, Disney sigue siendo el punto de referencia de Hollywood en cuanto a corrección política.

Mientras podemos ver el reino insular del Mediterráneo, los amigos de la protagonista provienen de diferentes orígenes étnicos: orientales, blancos y morenos. Desde que "Blancanieves y los siete enanitos" incluyó animales junto a las princesas, se ha convertido en un elemento básico de estas historias. Un lindo animal añade un encanto considerable a una película, evolucionando hasta convertirse en un personaje esencial y sirviendo como una adorable fuente de alivio cómico.

En esta película, la mascota de la princesa es una cabra, algo común en la región. Aunque tiene un diseño adorable, cuando comienza a hablar, la criatura que alguna vez fue vivaz y encantadora se transforma en un individuo sarcástico y pierde su vivacidad, pudiendo solo balar.


Además, la película presenta una mascota estrella, que tiene éxito debido a su naturaleza pequeña y adorable, que irradia ternura y amabilidad. Desafortunadamente, los creadores pretendían darle a la estrella un papel más importante, esperando una mayor interacción entre ella y la princesa, pero terminaron abandonando la idea.


"Wish" tiene una banda sonora aceptable con nueve canciones originales. Aunque no son tan pegadizas como "Libre soy", estas canciones son agradables y compatibles con la historia. Aunque el canto desenfrenado durante la batalla final parece un poco artificial, este formato funciona bien para una película con una mayor inclinación teatral. Este aspecto es una fuerte continuación de los rasgos típicos que se encuentran en las animaciones de princesas.

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"V de venganza"

Finalmente, hay un tema más profundo. Quizás estoy pensando demasiado, pero noté algunas cosas mientras veía la película: creo que es el primer tema antiutópico en la historia de la animación de princesas de Disney, con matices de "V de Vendetta". En el ámbito de las historias de princesas, "Wish: el poder de los deseos" es la primera en presentar una narrativa de rebelión contra la autoridad gobernante a través de la revuelta popular.

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