Sobreviviendo a la Navidad y El Socio del Silencio: El Lado B de la Navidad en el mundo cinematográfico

Introduccion

Siempre que llega esta altura del año la programación audiovisual recae en títulos que nos vienen acompañando hace varios lustros. Por supuesto que la temática a tocar el día de hoy no es otra que la Navidad, esta festividad tan clásica y casi que universal que ha sido homenajeada en el cine de distintas maneras. Por supuesto que primero tenemos el estilo de películas que se basan en la festividad en si junto a también todo lo que la rodea, y ahí nos encontramos con propuestas como Home Alone, Elf, Santa Cláusula, Navidad con los Cranks , El Expreso Polar, el Regalo Prometido, y bueno podría seguir abarcando varias líneas más pero creo que se entendió a qué estilo me estoy refiriendo, que no es otro que un tono familiar, ameno y esperanzador y que no da lugar a ningún aticiente. No sé discuten las figuras ni los ideales y las preocupaciones son de por más banales.
Por otro lado puedo nombrar otra categoría que son aquellos largometrajes que toman la fecha de la Navidad como contexto para contar una historia, y sirve para liberar y desarrollar cuestiones más íntimas y personales, aquí tenemos la recientemente estrenada The Holdovers, The Family Stone o The Holiday
Antes de pasar a la última categoría que arbitrariamente propuse, no quiero dejar lado a la película navideña por autonomasia , que no es otra que Die Hard de 1988. Quizás uno lo de los guiones mejores escritos de la historia del cine y que engloba tanto en la propia historia como en su simbología todo lo que atañe a la Navidad en su concepción religiosa. Sin dejar de ser una película de acción increíble con diálogos y personajes que todavía perduran en el imaginario popular.
Y por último tenemos las propuestas menos canónicas, más irreverentes, que no temen en bastardear a la festividad y todo lo que conlleva si no que también usar sus figuras más conocidas de formas para nada benévolas. Quieren destacar todo lo que no nos muestran las publicidades en esta altura del año, no nos quieren vender una falsa esperanza ( para parafrasear una icónica canción) , sino que nos muestran una óptica más oscura, desesperanzadora , infeliz y hasta quizás en algún punto posible. Y aquí es donde elegí dos títulos para desarrollar porque si bien podrían ser varios como por ejemplo Bad Santa , Black Christmas, Krampus y una favorita personal que merece más líneas llamada Better Watch Out. Pero sin mas para agregar voy a proceder con los títulos seleccionados.


Surviving Christmas ( 2004)

La primera es una película muy querida por mi que hasta quizás sea unas de las que conforma el top personal para ver en esta época del año y que pude ver por primera vez en una extraña maratón que realizo Cinecanal pre Navidad y que terminaba ( escuchen bien) con el estreno de Munich de Steven Spielberg ( si nada que ver pero hermosa película y ultra mega recomendasisima).
Pero bueno yendo al grano Surviving Christmas cuenta la historia de Drew Latham (Ben Affleck), un ejecutivo de una empresa muy importante que es abandonado por su novia Missy (Jennifer Morrison) en la vísperas de la Navidad, festividad con la que Drew no se siente mucho a gusto de hecho su idea era irse de vacaciones a Fiji y eso trae a colación la pelea con su novia que denuncia no entenderlo del todo y se queja de forma excesiva de no conocer la familia de su novio. Esto ocasiona que Drew aborde en el aeropuerto al psicólogo de su novia ( Stephen Root), en una escena que cada vez que la veo me saca un sonrisa porque tiene un humor de por más hilarante, y este le dice que tiene que hacer una lista de las cosas y quemarla en la casa de su infancia para sanar heridas del pasado y así continuar con un futuro prometedor. Esto desencadena que Drew ofrezca 250 mil dólares a la familia que vive en esa casa a cambio que estos los dejen pasar la navidad con ellos como un miembro más de la familia. Y bueno de aquí en más vamos a poder ver escenas de humor físico bien de comedia americana, pero con el agregado y aquí viene el devenir de la cuestión más interesante para mí a tratar que ese humor viene acompañado de un tono de infelicidad y desesperanza total.
Esa infelicidad se ve bien marcada en todos sus personajes, tanto como en Ben ese ejecutivo exitoso pero que sufre de un soledad más que notoria y que necesita a gritos de una compañía y recurre a esta locura para obtenerla, y porque también la familia de Tom Valco ( James Gandolfini) no se queda atrás un matrimonio totalmente feliz al borde del colapso y por ende de la separación, un hijo (Josh Zuckerman) que no sale de su habitación y que vive solo de lo que transmite la pantalla de su computadora ( contenidos eróticos sobre todo), y una hija ( Christina Applegate) que vuelve a su casa a festejar la fiestas con ciertos aires de superioridad frente a una familia que como vive en un caos constante casi que no nota ni su ausencia ni su presencia. Y por último el actor que contrata Ben para que sea su abuelo y su respectivo suplente que regalan escenas delirantes y casi que de mal gusto.
Quiero marcar unos paralelismos que me hacen relacionarla con la sitcom Seinfeld que es que los personajes que componen a ambas producciones son odiosos y casi que merecedores de todos lo padecimientos que sufren no hay arco narrativo que alcance para que ellos pueden redimirse de sus actos, son egoístas, envidiosos y altaneros. Justamente valores que nada se acercan a la festividad que elige la película para retratarlos. Quizá eso es lo que alejó a los críticos de buscarle el lado bueno a esta película ya que en los años posteriores al atentado a la Torres Gemelas Hollywood casi que viró a demostrar un lado luminoso en sus producciones, y todo los thrillers y policiales oscuros de presupuesto medio que tanto nos maravillaron en los 90 fueron dejados de lado por productos más fácil de digerir. Pero cuando la violencia, la oscuridad y la negatividad no está en la pantalla siempre se encuentra en otro lado nunca desaparece.

The Silent Partner (1978)

Y bueno del otro lado de la biblioteca, aunque en un estante no tan alejado, tenemos a The Silent Partner, un híbrido canadiense un tanto extraño cuyo argumento central es un hombre disfrazado de Papá Noel llamado Arthur Reikle (Christopher Plummer) que intenta robar una sucursal de un banco ubicado en un shopping durante época navideña, pero el método que elige es poco ortodoxo ya que lo hace deslizando una nota a través del mostrador a la que nadie presta atención, salvo Miles Cullen (Elliot Gould) quien una vez que descubre quien es el emisor de esa nota decide orquestar un simple pero inteligente plan para ser él quien se quede con el dinero una vez que el ladrón vuelva para intentar una vez consumar su robo. Hermoso verdad?
Bueno que decir de The Silent Partner porque si Die Hard es un guión sin ningún hueco, acá no estamos muy lejos. Tiene todo lo que necesitamos en este tipo de películas. Ahora que tipo de película es? Y ahí es donde me complico solo porque la película tiene condimentos de tantos estilos que configura un producto heterogéneo que sale airoso sea cual sea que nombremos. Porque es como ya dijimos una película navideña por su ambientación y que un personaje elige el disfraz de papá Noel para cometer el robó, es una heist movie porque el plot point del guíon y por lo tanto el motor de la historia es un robo a un banco, es una comedia no solo por su tono irónico sino también porque la mayoría de los actores que componen el reparto son reconocidos humoristas, sin ir más lejos Elliot Gould mundialmente recordado por su inolvidable papel de padre de Ross en Friends y John Candy que fue un front man de películas cómicas en la década de los 80s; y por último es un marcado thriller porque nunca abandona un tono sórdido que por momentos roza el terror, especialmente con las acciones llevadas a cabo por Christopher Plummer que con el correr del metraje irán corriendo cada vez más una linea de perversión que es poco tolerable comparándolas con las propuestas cinematográficas de hoy en día.

Y acá es donde me quiero detener porque los dos protagonistas tienen mucho en común, casi que en algún momento si hubiesen dejado el orgullo y la ambición de lado podrían haber conformado una fructífera sociedad. Pero eso nunca entro en la cuestión a pesar de que comparten características como la soledad y el desapego a la relaciones emocionales, si bien Miles parece tener un poco más de apego (sobretodo con sus peces) lo cierto es que las dos ideas que rumbean en su cabeza son cumplir con rectitud y seguridad con su trabajo y la otra aunque parezca contraria es justamente la forma de escapar de esa vida rutinaria. Y justamente lo que encuentra aquí es digamos una oportunidad de ser un ladrón por accidente pero, algo parecido a lo que le sucede al personaje de Ricardo Darin en la genial película del año 2006 El Aura sobre un taxidermista que siempre fantasea con robos hasta que se encuentra envuelto en la comisión de uno.
Y por otro lado Arthur que directamente es un psicópata con gran habilidad para ciertas artimañas, su soledad es totalmente buscada no quiere relacionarse con nadie y posee un carácter que aleja a cualquier persona, es una ironía enorme el disfraz que eligió ya que es el de un personaje cuyo mayor atractivo justamente es interactuar con todo ser humano.

Por lo tanto al tener dos personajes totalmente solitarios, con tendencias narcisistas, infelices, desesperanzados y con avaricia aquí es donde encuentro lo bello y destacable de la cuestión de retratarlos justamente en la festividad que representa todo lo contrario a todos esos valores.

Para concluir quiero mencionar que si bien ambas producciones si evocan ciertas características de toda pelicula navideña y logran la tan característica inmersión por la cual se destacan. Porque que en este lado del charco consumamos , tengamos tan presente y hasta que casi familiaricemos producciones navideñas en donde se muestran costumbre y condiciones climáticas totalmente desarraigadas a nuestras vivencias de esta festividad es todo un logro que demuestra una vez mas porque la industria hollywoodense es la numero uno en lo suyo. Aunque siempre me pregunte que haría un yanqui si viera como se festeja la Navidad en estos lares, no tengo la menor duda de que no entendería nada. Pero quizás estas producciones de lado B de la Navidad se acerquen mas a demostrar una concepción del mundo mas verdadero y menos aleccionador, porque el status quo sigue su orden, y la rueda sigue rodando aunque la festividad del hombre de rojo llegue. Pero en fin quise aportar el lado B de un canon mas que conocido y que yo tambien porque aunque me guste ver el lado oscuro de cualquier tematica tengo que decir: Feliz Navidad!

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