Wonka: Un viaje de ensueño lleno de chocolate

A diferencia del estilo caprichoso de “Charlie y la fábrica de chocolate”, “Wonka” tiene un estilo que proporciona una sensación cálida; junto con las divertidas actuaciones musicales, realmente me hizo sentir como si estuviera en un sueño, pero no de una manera infantil. La película no trata a los niños como niños ni a los adultos como puramente adultos: es apta para todas las edades.

La interpretación de Johnny Depp de Wonka es excéntrica pero tiene una inocencia infantil, mientras que la de Timothée Chalamet es gentil, cálida y optimista. ¿Cuál prefiero? Quizás sea mejor no comparar; creo que las diferencias entre ambos son muy buenas. Me gusta imaginar que la versión que vimos este año es un Wonka que creció en una familia amorosa. La vida del chocolatero estuvo llena de amor y cariño, y estos sentimientos se transmiten a través de la pantalla al espectador.

"Soñar es maravilloso". Wonka creció en una familia pobre pero amorosa, y apreciaba los raros chocolates que su madre hacía una vez al año; esta delicia incomparable dejó una profunda huella en él. El paraíso del chocolate del que hablaba su madre se convirtió en un sueño en el corazón de Wonka; quería hacer chocolates con ella para que todos los disfrutaran, pero ella terminó muriendo prematuramente. Con el sueño de “hacer el mejor chocolate”, emprendió su viaje. Quizás, debido a que creció en un ambiente amoroso, la bondad y el optimismo de Wonka a veces son exagerados; sólo tiene doce monedas de plata, pero las pierde todas y tiene que sentarse en un banco en el frío. Acabó encontrando un hotel, pero allí firmó un contrato que le obligó a trabajar para el dueño. Su extrema bondad y su demostración de no preocuparse por el mal de la gente son reflejos de alguien que estaba protegido por su familia; parece que su mala suerte es sólo temporal, como si nunca hubiera experimentado ninguna dificultad. Está dispuesto a aceptar pérdidas.

Las visuales de la película realmente me sorprendieron; la nieve se encargó de crear diferentes ambientes. Cuando Bleacher llevó a Wonka al hotel, hacía mucho frío, nadie caminaba afuera, solo la nieve cubría todo. A través de la ventana de cristal, la nieve que caía lentamente era romántica. Todo esto era muy realista: esperar el autobús en el frío, llevar ropa abrigada, pasar un rato al aire libre, sentarse junto a la ventana a tomar algo caliente.

Después de ver la película, mi imagen de los dulces cambió: hacen feliz a la gente, a pesar de estar llenos de calorías. La película refuerza la dulzura de los postres, enfatiza su belleza y aporta satisfacción sensorial a las personas, generando así satisfacción psicológica. Personalmente, me hizo darme cuenta de que algunos alimentos son realmente maravillosos: brindan satisfacción sensorial y quiero aprovecharlos mejor en el futuro.

Creo que la película principalmente quiere expresar la dulzura y delicia del chocolate, la felicidad de compartirlo y tener con quién compartirlo; al mismo tiempo, critica a las personas que no pueden resistir la tentación y son codiciosas. El sheriff, sobornado con una gran cantidad de chocolate, le ayuda a hacer cosas malas y acaba engordando. La película juzga a quienes anteponen el dinero a la familia y critica a quienes hacen trampa y conspiran, mientras elogia a quienes tienen buen carácter: todos los amigos que ayudan a Wonka se salvan. Todo el mundo es bueno porque la bondad y la belleza no se pueden forzar, encontrarlas es cuestión de suerte. Por eso siempre me conmoverá la belleza que se puede encontrar pero no buscar.

Noodles y Wonka se salvan mutuamente. Ella, que nunca había probado el chocolate, recibió la promesa de Wonka de que comería el dulce por el resto de su vida; él, que sufrió muchas pérdidas por el analfabetismo, recibió lecciones de Noodles. Ambos son muy amables y se ayudan mutuamente a progresar.

Finalmente, las partes visuales y musicales, impulsadas por la atmósfera, crean el ambiente. Con la voz y los colores, parece como si existiera un mundo de cuento de hadas: la persona soñadora e inocente que canta y alaba la bondad tiene el futuro más hermoso. Es una película divertida incluso si cierras los ojos y simplemente escuchas. ¡Incluso las canciones valen la pena!