¿Qué hace la gente en Sundance durante la temporada alta de esquí?

Las personas de la industria del cine no esquían

El lugar principal del Festival de Cine de Sundance es Park City, en Utah, el destino de esquí más famoso de Norteamérica. Es el centro de esquí más grande de los Estados Unidos y sus pistas se extienden hasta los 300 kilómetros. Además, Park City fue una de las sedes de los deportes de invierno durante los Juegos Olímpicos de Invierno de 2002.

Mi anfitrión de Airbnb, Dave, el capitán del equipo israelí de trineo, decidió asentarse allí con sus compañeros para vivir y entrenar. Aunque Dave puso en mi habitación, quizás intencionalmente, la última edición de un libro enorme titulado "Cuando Hollywood llegó a Utah", él no estaba realmente interesado en las diferentes proyecciones de películas que estaban mostrando a solo 600 metros de su casa. En lugar de eso, priorizó su vida deportiva. Al tercer día del festival, se dirigió a Las Vegas para competir en la liga de deportes adaptados con su equipo campeón, los "Vegas Golden Knights", como arquero.(aquí está la historia anterior)

Una de las razones por las que el festival de cine independiente más grande e importante del mundo se programó en este paraíso de los deportes de invierno es que, al fundador de Sundance, Robert Redford, le apasiona esquiar.

Si miramos hacia atrás en la historia de este paraíso donde confluyen el arte, el deporte y las propiedades, encontramos que, en 1968, Redford compró una propiedad privada llamada Timp Haven en la ladera sureste de la cordillera Wasatch. En 1969, después de coprotagonizar la icónica película de "Butch Cassidy" con Paul Newman, que marcó el ascenso del Nuevo Hollywood, nombró a su propiedad como "Sundance Resort" por su personaje Sundance Kid en la película.

En agosto del 1978, Sterling Van Wagenen, el jefe de la compañía de Redford, Wildwood Enterprises, y la Comisión de Cine de Utah cofundaron el Festival de Cine de Utah/Estados Unidos en la capital del estado, Salt Lake City. Después del festival, Van Wagenen renunció y asumió un papel de liderazgo en un proyecto piloto en el nuevo Instituto Sundance. En 1981, el Festival de Cine de Utah/Estados Unidos se trasladó a Park City, cambió su nombre al Festival de Cine y Video de Estados Unidos, y se reprogramó para el invierno frío de enero. Esta reprogramación definitiva la sugirió el famoso director de Hollywood, Sydney Pollack, que pensó que llevar a cabo el festival durante la temporada alta de esquí atraería más atención de Hollywood. Parece que Redford hizo un movimiento estratégico. En 1984, el Instituto Sundance, dirigido por Van Wagenen, se hizo cargo del festival y finalmente se convirtió en el Festival de Cine de Sundance. La insistencia de llevarlo a cabo en enero ayudó al festival a mantener su estatus como un referente mundial del cine independiente durante todo el año.

Sí, este año se celebra el 40.º aniversario del Festival de Cine de Sundance. Una multitud de estrellas y directores reconocidos y adinerados, como Christopher Nolan, Steven Soderbergh, Pedro Pascal, y Kristen Stewart asistieron para "celebrar" la ocasión. Sin embargo, al igual que en las ediciones pasadas, tanto las celebridades como las personas comunes de la industria del cine, no estaban interesados en esquiar. Si gugleas "celebridades esquiando en Sundance", los resultados van a mostrarte estrellas posando en fotos publicitarias en las montañas o frente a los teleféricos. Los que realmente se equiparon para esquiar fueron la actriz alemana Diane Kruger y, por supuesto, Redford, el "verdadero jefe" de Sundance.

Esto no significa que las personas en la industria del cine no puedan esquiar, sino que la apretada agenda de Sundance no les dio tiempo para hacerlo. Como resultado, se reveló un contraste interesante durante el festival. La pequeña ciudad de Park City, que solo tiene siete u ocho multicines, estaba saturada y no solo escaseaban los lugares para estacionar, sino que los hoteles y alojamientos de Airbnb estaban completamente reservados con antelación. Como mencioné antes, a pesar de los precios elevados, para las empresas de relaciones públicas, el festival fue útil porque llevaron a cabo eventos publicitarios con el fin de promocionar las películas. Los cineastas independientes, por su parte, pagaron un "arancel", pero pudieron hacer contactos en Sundance. Al mismo tiempo, los dos centros de esquí más grandes en Park City y en Deer Valley tuvieron una disminución notable del número de visitantes que querían evitar el festival. Algunas pistas de esquí en medio de las montañas que serpentean a través de los bosques tenían tan pocos visitantes que la página oficial de Ski Utah listó "pistas vacías" como una de las cinco razones principales para esquiar durante el festival de Sundance.

Como soy un entusiasta experimentado de los festivales de cine y del esquí, decidí hacer una "desintoxicación de películas" un domingo. Contacté a la agencia de turismo local y logré conseguir un pase de esquí gratis, que hubiera costado una fortuna, además del equipo de esquí. En comparación con el festival de hace cinco años atrás, esta vez hubo muchos más esquiadores en la montaña y tuvimos muchos paseos en teleférico, así que me hice un par de compañeros de esquí.

Cada vez que les pregunté si miraban películas, sus respuestas eran "no" o "compré un par de entradas, podría ver algunas pelis". Un hombre joven, que tenía un pase de temporada para diferentes centros de esquí en las Montañas Rocosas, mencionó que vio "A Real Pain", dirigida y protagonizada por Jesse Eisenberg y la describió como una "película agradable de viaje". Sin embargo, se preguntó si verían películas sobre esquí o con escenas al aire libre en Sundance.

"Eso solo pasa en Banff (el Festival de Cine de Montaña)", dije y agregué "hace cinco años, antes de Sundance, un productor importante de películas de esquí de Utah murió y Park City organizó eventos conmemorativos en su honor. Su historia se convirtió en un documental, pero no lo proyectaron en Sundance, la proyectaron en otro evento llamado Slamdance, que se llevó a cabo de forma simultánea en el mismo lugar".

Tanto Slamdance como Sundance apoyan a Palestina

¿Qué es Slamdance? Suena como un festival de cine agresivo.

Una noche, una directora que conozco me invitó a ver su documental que fue seleccionado para el festival. Al lado mío se sentó una chica que estudiaba cine en San Francisco y uno de sus cortometrajes experimentales llamado "Fortune Export" fue uno de los seleccionados para Slamdance.

"Déjame explicarte qué tipo de festival es. En 1995, cinco cineastas independientes presentaron sus trabajos en Sundance, pero el comité organizador los rechazó. Estaban tan frustrados que decidieron crear su propio festival de cine y lo programaron intencionalmente a la misma hora y en el mismo lugar para contraatacar a Sundance". Por supuesto, durante la temporada alta de esquí fue imposible competir contra el festival de Sundance que tiene buena financiación y terminaron proyectando un número limitado de películas en un lugar alquilado que tenía dos salas pequeñas.

Sin embargo, la presencia de Slamdance no fue inferior a la de Sundance. Como no podían pagar espacios publicitarios fuera de los hoteles y negocios lujosos, los cineastas aprovecharon al máximo los espacios visibles en las calles, donde podían colocar carteles gratuitamente. Imprimieron pósteres de obras seleccionadas con información sobre los foros de debate en hojas A4 y los pegaron por toda la ciudad. Sundance, por su parte, promovió sus eventos oficiales y comerciales en su página oficial, en la aplicación móvil y por correo electrónico. En términos generales, los foros de Sundance fueron buenos, aunque el objetivo de la mayoría de los cineastas independientes era hacer conexiones. Con tantas actividades, ¿en qué momento los participantes se tomarían un teleférico desde el Teatro Egipcio hasta la montaña para esquiar?

En la pared de carteles, a lo largo de la calle, había dos recién pegados con titulares sobre un tema de actualidad que captaron la atención de los transeúntes fácilmente. Tenían mensajes simples y directos de apoyo a Palestina. Al día siguiente, mientras esperaba en una fila afuera de Filmmaker Lodge para asistir a un foro, la conmoción en la calle se hizo muy fuerte. Más de una docena de manifestantes con banderas de Palestina gritaban "Palestina libre". Una mujer que estaba detrás de mí, una curadora de arte contemporáneo de Nueva York, se unió a los cánticos con entusiasmo. Sin embargo, del otro lado de la calle había una sola bandera de Israel; cuando el portador de la bandera tuvo la oportunidad de hablar por el megáfono, simplemente dijo: "recuerden a los rehenes que aún están en Gaza". La señora de Nueva York me dijo: "aunque estoy acostumbrada a ver estas escenas en Nueva York, siempre me solidarizo con aquellos que apoyan a Palestina. En Sundance, los cineastas independientes pueden discernir entre el bien y el mal, lo cual me gratifica, pero los Óscar y Hollywood son casos completamente diferentes".

Con las palabras de esta señora, pude especular un poco más sobre las divisiones que hay dentro de la sociedad estadounidense: aunque Hollywood se hizo más internacional, todavía está bajo el control de los capitalistas judíos adinerados. Teniendo esto en cuenta, se hace más evidente que Sundance no está del mismo lado que Hollywood.

El ascenso de la IA, la caída de la RV

El foro al que estaba esperando para entrar fue sobre IA e involucró a cuatro artistas interdisciplinares de las áreas de la tecnología y las artes. Como no logré ingresar porque estaba al final de la fila, tuve que mirar la transmisión televisada del debate en un café. De todas formas, la manifestación afuera era cada vez más ruidosa y se hizo difícil enfocarme en las charlas sobre la realidad virtual en las películas. Uno de los artistas dijo: "en mis creaciones, prefiero lidiar con la inteligencia artificial que trabajar con humanos porque me ahorro muchos problemas".

Quizás, como en la disputa de Israel contra Palestina, siempre que haya humanos involucrados habrá problemas. Al menos, en la etapa actual del desarrollo de la IA, no hay indicadores de que tenga conciencia para desarrollar inclinaciones políticas de forma independiente.

El Festival de Cine de Sundance de este año presentó bastantes trabajos centrados en la IA y vi algunas películas de drama, documentales y de Nueva Frontera.

"Love Me", protagonizada por Kristen Stewart y Steven Yeun, explora los temas profundos del tiempo y lo que realmente merece ser eterno, por medio de una historia de amor entre una boya y un satélite que atraviesa miles de millones de años, después de la desaparición de los humanos. Aunque se dice que los actores son los protagonistas, durante la mayor parte de la película, van a retratar a sus personajes con animaciones o imágenes generadas por IA, basándose en el libro ilustrado original.

El tema del documental "Love Machina" es una pareja extraordinaria. Martine, una emprendedora futurista se enamora profundamente de su compañera Bina. Ellas deciden usar las últimas tecnologías de modelado biológico para crear un robot humanoide llamado Bina48. Para ambas, que están comprometidas con la plenitud espiritual, su objetivo es romper las fronteras que hay entre el hombre y la mujer, la vida y la muerte, el cielo y la tierra, el espíritu y la carne. Martine enfatiza: "no creo que me haya convertido en mujer, ya no tengo conciencia de género, solo soy yo misma".

Esta vez, la categoría Nueva Frontera presentó solo dos trabajos y uno de ellos es el documental "Eno" sobre el músico Brian Eno, uno de los responsables del desarrollo de la música ambiental. El director hizo hincapié en que la película usa un motor de IA generativa que modifica la edición para que cada proyección sea diferente. Sin embargo, expresó dudas sobre si tuvo sentido revelarle eso al público: "pero, ¿cuál es el punto de hacer esto? Siéntanlo ustedes mismos". Después de ver toda la película, se percibe una falta total de emoción. Es un desafío discernir si los editores de cine la crearon convenientemente o si se editó casualmente con IA, pero esto último no tiene sentido.

La categoría de Nueva Frontera fue la que más me sorprendió cuando llegué a Sundance, hace 5 años: presentaron muchos trabajos con RV (realidad virtual), RA (realidad aumentada) y RM (realidad mixta). Puedes ponerte anteojos de realidad virtual, caminar sobre un pasto realista creado por el Royal Shakespeare Theater y sumergirte en la atmósfera de "As You Like It". Puedes sentarte en una mesa en un bar, escuchar a las personas de color, sentadas alrededor tuyo, hablando sobre las injusticias que sufrieron en los años cincuenta y sesenta y pueden mostrarte el "Libro verde" que usaron como una guía para viajar en el pasado.

Pero ahora, estas cosas que ahora llamo el "octavo arte", la fusión verdaderamente vanguardista y de alto nivel de la ciencia y el arte desaparecieron. Les pregunté a los periodistas que asistieron muchas veces al festival y a los pocos voluntarios que vi si sabían la razón por la cual el Instituto Sundance no respondía mis correos electrónicos. La respuesta general que me dieron fue que, después de la pandemia, redujeron la financiación de Sundance.

Volviendo al tema de la temporada alta de esquí, alquilar un espacio es caro y hay que reservarlo con antelación. Para crear una experiencia de realidad mixta más inmersiva e íntima con la realidad virtual, sería necesario conseguir un lugar grande, y después tendrían que subalquilarlo a varias instituciones y empresas de los sectores de las artes y las ciencias para que puedan exhibir sus proyectos innovadores. La categoría Nueva Frontera se redujo significativamente porque no cuentan con un patrocinador que lidere este movimiento.

Un director de fotografía de Los Ángeles me dijo, "las experiencias de realidad virtual tuvieron una fuerte presencia en la Conferencia y Festival SXSW en Texas en marzo". Estaba disconforme con todos los cines de Sundance, pero también con todos los de Park City. Cuestionó, "¿acaso no hay ni siquiera una pantalla de un tamaño más grande con una resolución correspondiente para estas películas?" Después de todo, como director de fotografía, tiene un par de ojos perspicaces.

Cuando las actividades prácticas y divertidas terminaron, surgió otro proyecto cinematográfico que exigía un compromiso personal. En la categoría episódica, el documental "Conbody V.S. Everybody" cuenta la historia inspiradora de un ex recluso que lleva a Nueva York sus conocimientos sobre la preparación física que adquirió en la cárcel y establece una cadena de gimnasios al estilo "Conbody". Durante el Festival de Cine de Sundance, este recluso reformado dio un paso más adelante en la promoción de su proyecto personal. Alquiló un espacio por tres días y permitió que los profesionales de la industria y los cinéfilos prueben su rutina de ejercicios de forma gratuita. Lamentablemente, después de haber visto demasiadas películas, estaba tan cansado que me quedé dormido y me perdí sus sesiones matutinas.

Menos RV, más ejercicio: no es una mala idea. En este cálido invierno, está bueno esquiar sin usar gafas de realidad virtual en las montañas reales y no en las pistas de Park City generadas con inteligencia artificial.