Wonka: Mágica, divertida y un Timothée Chalamet como nunca antes visto

Spoilers

El mundo de las remakes, secuelas y precuelas siguen a rienda suelta con sus producciones. En esta ocasión, hay que hacer referencia a la adaptación con muchas libertades creativas de un clásico de Roald Dahl como es “Charlie y la Fábrica de Chocolate" en donde este mundo se basará en los origines del personaje de Willy Wonka, que será personalizado por el actor del momento como es Timothée Chalamet, haciéndonos vivir una experiencia mágica, divertida y repleta de canciones que en algún momento se volverán memorables. Pero si tenemos en cuenta que Chalamet tiene que interpretar un personaje con mucho lore y con interpretaciones icónicas del pasado, la gran pregunta será si está a la altura de las circunstancias.

Willy Wonka es un joven que luego de viajar por el mundo durante siete años, regresa con el sueño de abrir la chocolatería de sus sueños y que el mundo pueda conocer sus invenciones en esta golosina. Sin embargo, una serie de imprevistos y de enemigos en el rubro del chocolate, le pondrán diferentes tipos de obstáculos con el afán de truncar su sueño, ya que temen que el éxito de Wonka los termine eclipsando.“Wonka” es una película que a la hora de su promoción fue muy inteligente como le vendió el producto al público, ya que estamos en presencia de una película musical y que es un género que por lo general los espectadores no suelen muy consumidores de esto en salas de cines. Lo cual fue una grata sorpresa y que permitió dar un gran rendimiento en la recaudación en la taquilla, principalmente por la puesta en escena de una producción que transmite alegría, magia y un ambiente completamente familiar. No casualidad que su estreno en salas haya sido durante la época de las fiestas, ya que tiene ese espíritu encantador y por momentos cursi con un mensaje muy claro de luchar por tus sueños. Todo esto es ideal, ya que los espectadores están como más propensos a recibir este tipo de contenido y poder disfrutarlo con una gran puesta en escena del director Paul King.Con respecto a nuestro protagonista, Willy Wonka interpretado por Timothée Chalamet, una caracterización muy diferente y para nada comparable a los trabajos hechos en el pasado de Jim Wilder y Johnny Depp en el personaje de Willy Wonka, sino que Chalamet nos una adaptación mucho más cuerda y no tan salida de la vaina, teniendo en cuenta que estamos presenciando los primeros años de Willy y que aún no ha atravesado muchos desequilibrios para ver a ese personaje histriónico y delirante que conocemos. Es un Wonka que aun preserva una gran cantidad de inocencia y que sirve a la perfección para ver un Chalamet que consigue explorar su rol más alegre y optimista de su carrera hasta el momento, ya que por lo general vemos una faceta dramática, depresiva, arrogante o en algunas ocasiones cómicas de este actor, pero nunca de esta manera como lo vemos en “Wonka”. Es una película que con el resto de sus personajes respeta a raja tabla el status quo que la obra original de Roald Dahl propone y nos ofrece a personajes complemente genéricos, lo cual se agradece porque de esto se trata y es de poder trasladar un cuento con personajes que parecen caricaturescos a la gran pantalla y lo hace brillantemente, casi tan brillante como “Charlie y la Fábrica de Chocolate” de Tim Burton. Los malos son malos porque son malos arrogantes, codiciosos y lo único que les interesa es poder solamente ellos manejar el negocio de los chocolates y el concepto de un “Cartel de Chocolate” como una especie de mafia o banda de capos narcos de chocolate, es algo complemente brillante. Si bien hay muchas cosas que uno como espectador se puede anticipar a los hechos que se muestran, todo esta presentado de tal forma que es divertido y mágico de ver, ayudado de unos efectos visuales ejecutados correctamente a pesar de algún que otro momento que no está del todo bien pulido pero que de igual manera se perdona. Quizás uno de sus puntos negativos es Hugh Grant como Oompa-Loompa, que visualmente se ve muy extraño y su interpretación parece hecha con el sentimiento de “mientras rápido termine esta escena mejor”, lo cual es entendible por que el propio actor ha manifestado su descontento con la experiencia de usar un traje de CGI para este proyecto y que claramente, como hemos remarcado, los efectos visuales en este aspecto dejan mucho que desear .Contando con unos vestuarios increíbles y como se llevan a cabo las escenas en locaciones pequeñas, ya que son siempre los mismos escenarios y esto da una sensación de que por momentos estamos ante un gran show de comedia musical que podríamos presenciar en Broadway. Esto es muy favorable por que genera una atmósfera mucho más íntima y mágica, además de permitir un mejor despliegue para las interacciones entre los personajes. Una música espectacular, con canciones y números musicales que ayuda a que la historia sea mucho más ligera y que en gran medida esto es esta producción.

“Wonka” es una precuela que consigue tener identidad propia y no cargar con el peso de las adaptaciones de obras literarias o de producciones icónicas. Timothée Chalamet como Wonka está en prácticamente en cada escena de la película y que hace que sigamos verdaderamente de cerca al personaje en cada paso que da para alcanzar sus y sueños. Paul King en la dirección consigue hacer un gran éxito de algo que muy probablemente con otro cineasta haya sido un fracaso. No hay ningún gris, los personajes son blanco y negro, pero todo esta tan bien planteado y ejecutado que abrazamos la simpleza narrativa que todo se desarrolla. Divertida, familiar, melosa y mágica, son las maneras de definir esta película que no tendrá el boleto dorado para la fábrica de Wonka pero que si es un boleto para pasar un gran momento en familia comiendo chocolate y viendo como esta hermosa historia cobra vida.

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