Teresa Palmer comenzó su formación artística con clases de actuación y primeros papeles en anuncios locales y trabajos extra en Australia antes de dejar la universidad para dedicarse a la gran pantalla. Su trayectoria incluye un gran éxito con una película independiente que se estrenó en Cannes, lo que le dio confianza y la llevó a ser representada por agentes estadounidenses. Pasó de proyectos australianos a continuar trabajando en Hollywood, ampliando su presencia desde apariciones especiales hasta papeles protagónicos en televisión y cine.