Hasta el fin del mundo (1991)

Ubicado en un 1999 futurista, una mujer (Dommartin) tiene un accidente automovilístico con un par de ladrones de bancos, que solicitan su ayuda para llevar el dinero robado a una caída en París. En el camino, se encuentra con otro fugitivo de la ley (herida), un estadounidense que está siendo perseguido por la CIA. Afirma que los cargos son falsos. Las autoridades quieren confiscar un dispositivo que inventó su padre que permite a cualquiera registrar sus sueños y visión. En la carrera de los ladrones de bancos y la CIA, la pareja abarca todo el mundo, terminando en Australia en la instalación de investigación de su padre (von Sydow), donde esperan reproducir las grabaciones que lastimaron capturadas para su madre ciega. Una subtrama sobre un satélite nuclear indio dañado que se estrella contra la Tierra y que causa el fin de la civilización es una adición desconcertante, aunque significativa, a la película.