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3 películas que convirtieron a Daniel Day Lewis en un actor de culto

Nos hacemos la peli con este actorazo que, con dolor, se ha retirado del foco de luz para tener una vida en calma luego de años de gran servicio. Para honrarlo, te dejamos nuestro TOP 3 de Daniel Day Lewis, un grand e de grandes.

La insoportable levedad del ser (1988)

Estamos ante su primer papel protagonista y su primera inmersión profunda en el Método. Basada en la increíble novela de Milan Kundera, su personaje era checo, y a este monstruo camaleónico obsesivo le pareció una oportunidad para aprender el idioma al mismo nivel que un nativo. Philip Kaufman, director de la cinta casi enloquece con la pasión del actor que insistía en no salirse ni un segundo de su papel. Este es el comienzo de la leyenda del actor como intensito.

Mi pie izquierdo (1989)

Christy Brown, pintor irlandés aquejado de parálisis cerebral, no era un personaje fácil de interpretar. Pero siempre hay un roto para un descocido: Daniel Day-Lewis, tan convencido de que su versión del Método podía alcanzar cualquier objetivo se lanzó a este enorme desafío sin dudarlo. Estamos ante uno de los trabajos física y mentalmente más exigentes que un actor haya realizado jamás. Literalmente, el actor no se levantó de su silla de ruedas durante todo el proceso de rodaje, exigiendole a los técnicos que lo lleven incluso por las zonas más inaccesibles del set. Solo así, pensó, podría entender los retos y dificultades que configuraban el día a día de Brown. Lo mismo va para su alimentación, que consistió únicamente en papillas que alguien debía darle con una cuchara. Fue nominado a infinidad de premios y llamó la atención de la industria, pero también dejó su marca indeleble en su profesión. Existen los actores y estos fenómenos de la actuación capaces de todo por un papel, hubo un gran revuelo y debate provocado por el actor con esta película.

Gangs of New York (2002)

Los noventa fueron muy fructíferos para el actor, pero tras The Boxer, Daniel prácticamente despareció de la industria. Él mismo lo definió como un “retiro” para perfeccionar su trabajo con la madera que fue la gran pasión de su vida. Estuvo algunos años en Italia donde incluso incursionó en trabajar como zapatero a finales de los 90s y principios de los 2000s. Pero de la mano de Scorsese, redobló la apuesta con Bill el Carnicero que fue el papel que lo sacó de este parate. Este rol inauguró la etapa dorada de su carrera, en la que cada nuevo trabajo suyo se recibía como un acontecimiento. De hecho su mera presencia pasó a ser sinónimo de maestría. Me atrevo a asegurar que Gangs of New York es lo que es gracias a su actuación.

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