Wilson y Vivian se conocen en un sitio de citas el último día del año. Ambos esconden su soledad y sus frustradas y gastadas relaciones anteriores. La película dirigida por Alex Holdridge posee una visión triste y dramática de las relaciones de pareja. Con ello no quiero decir que escape de la realidad. Me parece que se acerca bastante a lo cotidiano y real, pero con la lupa puesta en los finales. En la vida real, no todos los finales son felices, y mucho menos cuando se trata de amor.
"Buscando un beso a medianoche" tiene similitudes con la genial "Before Sunrise", aunque más punzante, irreverente y triste que la dirigida por Richard Linklater. El blanco y negro ayuda mucho a que esas características se acentúen más.
La cinta tiene un muy buen guión carente de cursilería y lugares comunes. Todos los diálogos y conversaciones de Wilson y Vivian no tienen desperdicio. Son inteligentes, inmaduros en el buen sentido, llenos de chispa y todas esas cosas que aparecen cuando hay química entre dos personas. La historia se desarrolla en Los Ángeles, California, y enfatiza la metáfora del año nuevo y la posibilidad de comenzar una nueva vida cada primero de enero. Por supuesto, la película lleva esto a las relaciones de pareja.
Buena película. Triste, melancólica, pero real. La soledad siempre ha sido un estado que muchas personas viven y sufren, y más aún en época de redes sociales. Paradojas de los tiempos en que vivimos. (Nota 7/10)
¡Comparte lo que piensas!
Sé la primera persona en comenzar una conversación.