Niagara (1953) de Henry Hathaway es un film noir en color que podemos ver a ni más ni menos que a Marilyn Monroe como Roose Loomis, una seductora y embustera femme fatale. También el reparto cuenta con Joseph Cotten, Jean Peters y Max Showalter.

Los Cutler van a vacacionar a Nueva York, a las cercanías del Niágara. Sin embargo, sus vecinos los Loomis arruinaran su viaje. Roose engaña a su marido George (Joseph Cotten) y planea matarlo junto a su amante más joven pero falla en el intento. Ella termina en el manicomio al ver que el cuerpo que se encuentra en la morgue es de su amante y no de su esposo.
Ahora bien, George Lumis queda vivo y por el momento sólo lo sabrá Polly Cutler (Jean Peters), que lo ve por casualidad. George intenta chantajearla para que no avise a la policía que está vivo y matar a su traidora esposa Roose, el personaje de Marylin. ¿Logrará George matar a su esposa Roose?

Weller en The New York Times expresó: "Vista desde cualquier ángulo, las cataratas y Monroe dejan poco que desear a un público razonablemente atento". Las cataratas del Niágara nos brindan un final sublime, y sin duda alguna, la presencia de Marylin Monroe en el filme es alucinante. Sin desmerecer el gran trabajo actoral de una inocente Jean Peters y un perverso Joseph Cotten.
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