È stata la mano di Dio o Fue la mano de Dios es un filme del aclamado director italiano Paolo Sorrentino (La grande belleza), quien vuelve a la ciudad donde nació, Nápoles, donde cuenta una historia muy personal de su juventud, mezclando el cine con el deporte transcurre su emotivo y doloroso pasado para compartirlo con el público.
Se trata de un drama italiano estrenado en Netflix el 15 de diciembre de 2021, presenta la historia de un joven, Fabietto Schisa (Filippo Scotti), ubicada en el Nápoles de los años ochenta.
En la historia hay algunas sorpresas como la llegada del legendario futbolista argentino Diego Maradona, y para una tragedia igual tan imprevista como esa. La alegría y la desgracia se cruzan y comienza el futuro de Fabietto como cineasta.
Es intensa y divertida al mismo tiempo, se hace muy fluida para el espectador y un gran papel muy bien interpretado por parte de Filippo Scotti. El personaje de Fabietto pierde a sus padres y salva su vida al ir a un partido de su ídolo, Maradona, y debido a esto cambia completamente su destino, por ello “Fue la mano de Dios”.
Otro punto a destacar es la sensata fotografía, que acompaña de forma exitosa la cinta, logra una belleza en escenas que consiguen llegar a la emoción del espectador.
Puede que esta no sea la mejor obra del director pero no está muy lejos de ello, tiene un argumento muy emotivo e íntimo, es meritorio como el director cambia un poco su estilo para contar su propia tragedia.
Es una película maravillosa y muy recomendable, está seleccionada como el Mejor Largometraje Internacional en los 94º Premios de la Academia y es, en mi opinión, una de las mejores cintas que nos dejó el 2021.
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