¿Cómo fue que perdimos nuestro niño interior?

¿Cuándo fue la última vez que viste El Pájaro Loco: La película?

En mi caso, hace casi 20 años que escuché nada sobre el Pájaro Loco. Anoche, cuando estaba intentando buscar algo para ver en Netflix, vi que El Pájaro Loco se va de campamento ocupaba un lugar entre las 10 mejores películas del ránking semanal. Esa película ya había estado entre las 10 mejores durante 4 semanas seguidas.

Y me sorprendió.

Este pájaro colorado y travieso ya no era parte de mi vida. Cuando era pequeño, lo quería muchísimo. Este pájaro carpintero antropomórfico siempre está alegre y es muy bueno haciendo bromas. Siempre se presenta con su típica frase que es genial: "¿Adivina quién? Ja Ja Ja JA Ja, Ja Ja Ja JA Ja, Ja Ja Ja JA ja, jejejejejejeje".

(¿Saben qué? Hasta encontré unas instrucciones sobre cómo reírse como el Pájaro Loco.)

Woody me encanta porque, a diferencia de él, yo soy una especie de introvertido. Me encantaría reírme como él, pero no es probable que me ría así. Gracias a Netflix, él volvió a mi vida una vez más.

Mientras seguía muy entusiasmado por el descubrimiento, me pregunté qué opinaba la gente sobre la película, así que la busqué en Peliplat.

Y me arrepentí de haberla buscado en el preciso momento en el que vi la puntuación: 4,6 de 10.

Bueno, gracias por la info, Peliplat. Arruinaste mi noche. Hace un rato no tenía nada para ver y ahora insinúas que esta película decepcionó a mucha gente.

Mmmmm… ¿Tan mala es la película? Tuve que verla con mis propios ojos.

Con mucha nostalgia, volví a Netflix y empecé a ver El Pájaro Loco se va de campamento.

Woody sigue siendo Woody, un pájaro travieso que hace bromas y que tiene una risa muy característica.

Y Buzz sigue siendo Buzz, un buitre astuto y oportunista que siempre busca la forma de estafar a Woody.

(Woody en El Pájaro Loco se va de campamento)

Todo es como antes, solo que mientras la veía, sentía algo raro dentro mío: un sentimiento que me decía que había algo malo en esta película.

Pero, ¿qué estaba mal? Cuando volví a Peliplat y revisé la sección de los comentarios, me topé con diversas opiniones. Algunos dijeron que los efectos hechos por computadora son terribles, mientras que otros dijeron que la historia no tenía sentido.

Bueno…Personalmente creo que los efectos estuvieron bien, pero me costó mucho seguir la historia.

Habiendo dicho eso, vi algo más que me resultó interesante. Entre todas estas reseñas, buenas y malas, la mayoría de las personas admitió con sinceridad que la película se adapta mejor a los niños. Hay muchos comentarios de gente quejándose sobre lo mucho que odian la película, pero tuvieron que verla con sus hijos. Ellos la AMAN.

Qué irónico. De repente, escuché la risa distintiva de Woody.

La película es genial. Yo solo estaba siendo demasiado "adulto" como para comprender su encanto.

Como adulto, esperaba que la película contara una historia apta para adultos y supuse que tenía que ser sofisticada, bien organizada y disciplinada.

Como no me gustaría que ninguna de esas bromas de la película sucedan en la vida real, me di cuenta de que ese sentimiento raro era mi zona de comodidad (típico de adulto serio) que estaba siendo destrozada por la naturaleza salvaje de Woody. Quise ver a Woody porque tenía ganas de alejarme a algún lugar que no tuviera tanto que ver con la adultez. El problema es que he sido un adulto durante demasiado tiempo.

Ningún niño quiere ser serio.

Cuando era pequeño, me la pasaba haciendo sonidos y, por más de que tuviera miedo a que me castigaran, lo hacía de todas formas, a veces de forma involuntaria.

Ningún niño nació sabiendo cómo hacer sonidos de forma correcta.

El Pájaro Loco se va de campamento es una película genial, en cierto modo, porque orienta a los niños a que perfeccionen sus talentos en el lugar indicado. Cuando terminé de ver la película, sentí que no le dieron una mala puntuación por la película en sí. Simplemente, nosotros, las personas que solíamos amar a Woody, crecimos y nos convertimos en personas que ya no lo aman.