HEAT: "El desafío de la acción sin música"

Sin lugar a dudas, HEAT debe ser una de las películas con una de las escenas más icónicas en el género de acción, pero ¿a qué se debe esto?.

HEAT tiene un elenco de primera línea y un guión espectacular, pero lo que todo el mundo recuerda a la perfección cuando la mencionan, es la secuencia del tiroteo al salir del banco donde los atracadores se percatan de la presencia policial en las afueras del mismo.

Durante el atraco, en el interior del banco podemos escuchar un score musical dramático que va acelerando la tensión del espectador, pero al salir de ese interior, cuando el actor Val Kilmer logra ver a los policías, realiza los primeros disparos y ahí, en ese preciso momento, es cuando se arma ¡la belleza!… se acaba la música.

La genialidad de Michael Mann es esta batalla, queda marcada por la ausencia de música en la misma, lo que escuchamos, es exactamente lo que vemos: disparos, gritos, alarmas, respiraciones, pasos, vidrios estallando, entre otros. El no escuchar musicalización logra que el subconsciente se adentre más en la pantalla y se sienta que está literalmente “en medio de un tiroteo”. Es sólo cuando le disparan en el cuello a Val Kilmer, que volvemos a percibir muy sutilmente, un leve score que nos empieza a contar el drama de la caída de los anti-héroes.

Contar una historia es un arte, pero cuando hablamos de narrarla en el lenguaje de guión cinematográfico, debemos tener en cuenta que se mezclan lo artístico y lo técnico y cuando hacemos nuestro argumento o escaleta donde enlistamos a nuestros personajes, hacemos sus perfiles para llegar a conocerlos mejor (como escritor) y que vayan cobrando vida por sí solos, no podemos dejar atrás a uno de los personajes más importantes de cualquier historia: “La Música”.

“Al principio de cada proyecto, no tengo ni idea de cómo va a ser la música, pero si tengo que resumirlo en una sola palabra, sería la Historia.” -Hans Zimmer-

“No es que los diálogos suenan como música, es que son música y viceversa.” -Aaron Sorkin-

La musicalización de una película no es poner canciones pegajosas para el espectador y realizar piezas para rellenar espacios vacíos y silencios incómodos, la música debe ser un personaje en la historia que nos va narrando, contando o apoyando durante cada secuencia, debe trabajar el subconsciente y el consciente, crear los ambientes o prepararnos para los mismos.

Existen los denominados “Leitmotif”, que son pequeñas piezas musicales asociadas a un personaje, lugar o idea que son una herramienta magistral en la narrativa, como por ejemplo la marcha imperial cada vez que va a aparecer DARTH VADER en STAR WARS, o algo más simple como los dos terrorificos acordes de JAWS cada vez que el tiburón está a punto de hacer su aparición en el mar.

De la misma forma en que la música es un personaje más en la historia, también lo es el silencio o la ausencia de la misma en algún momento como el clásico tiroteo de HEAT del que hablamos. Las películas son AUDIO-VISUALES y el manejo de ambas partes debe ser un proceso de alquímia que nos lleve a deleitar la panacea universal del séptimo arte en toda su gloria.

Si usted no se había percatado de este detalle en HEAT, lo invito a buscar esta secuencia o mejor aún, ha deleitarse de nuevo con esta joya del cine de acción donde queda bien marcada la importancia de la música en el cine, tanto de su presencia, como de su ausencia.

Gustavo A. López C.

@Galop27