Revisitando Les cousins La nouvelle Vague de Claude Chabrol (Lado B)

Escrito por Cristian L. Pires

Lunes 27 de mayo de 2024

El idealista y algo ingenuo Charles viaja a Paris para terminar sus estudios, llegando a la casa de su tío se encuentra con su primo Paul, un playboy algo decadente que lo hace conocer la verdadera ciudad, en medio de esta nueva realidad de fiestas y placer Charles conoce a Florence, una joven que al igual que su primo prueban ser demasiado para el. Escrita, producida y dirigida por Claude Chabrol, les cousins o los primos se estrenó el 11 de marzo de 1959, siguiendo el incipiente nacimiento de los filmes llamados “de la nueva ola” esta película cuenta la historia de un joven de campo expuesto a la elite parisina de finales de los 50s.

Una mordaz historia sobre el dilema de la inocencia perdida es lo que este filme quiere contar, nuevamente con una necesidad de explorar temas mas reales Chabrol parece tomar inspiración de su propia vida para contar una historia potente, no tanto por sus elementos, sus personajes, sino por lo universal de su planteo, sentirse ajeno en un lugar. Ahora… ¿no fue acaso este, el mismo tema que abarco en Le beau Serge?

Le Beau Serge el inicio de la Nouvelle Vague

Si… pero el truco es que ahora las cosas están invertidas, no solo la pareja protagonista sino el escenario y el tipo de critica que se hace, es por eso que en el titulo de este articulo les puse Lado B, aunque no es obligatorio estos 2 filmes se disfrutan mas viéndolos juntos.

Esta vez es el inocente Charles de Gerard Blain, el personaje que esta fuera de su elemento y Jean Claude Brialy actúa como la contraparte que muestra la opulencia y la surreal despreocupación de la nueva juventud, la que le escupe constantemente en la cara al incrédulo protagonista, mientras este encuentra refugio en un hombre que vende libros.

Este ultimo detalle también es clave, por que introduce uno de los pocos personajes maduros del filme, que por su cuenta expone otro contraste que tampoco parece convencer demasiado a Charles, estrechando así todavía mas su entorno… para cuando este joven se fija en Florence, una chica que pertenece al mundo de Paul, su enamoramiento no solo se condice con su naturaleza poco experimentada, sino que se condice con su necesidad de encontrar algo de belleza real en un mundo tan caótico y falso.

Esto por contraposición, le da a Florence un trasfondo un poco mas complejo, de estar juntos ¿cuanto podría durar su amor?¿Florence esta enamorada o solo un poco atraída por la fragilidad inocente de Charles? Preguntas que el personaje de Paul usa a su favor para quedarse con Florence cortándole el paso a su primo, dando pie al único gran problema que veo en este filme. Si bien esta película se vende como un romance donde un trio amoroso pone a dos primos en contra... la película no lo desarrolla bien, no me considero un amante del melodrama exagerado en los romances mas burdos, pero tampoco me parece que el filme haga demasiado esfuerzo con esta premisa, simplemente vemos a Charles ser un poco mas miserable, mientras se lamenta con mas ahínco su suerte sin que se suceda realmente, un trio amoroso, el mismo personaje dice en un momento que no podría apenarse por algo que nunca fue de el.

Descartando esto, nuevamente las interpretaciones de los protagonistas son fantásticas y el alma de la cinta, hay un muy buen equilibrio entre ambos que permite que la trama se desarrolle a un ritmo muy bueno, la escena de la fiesta en casa de Paul creo que es el punto mas lento pero también la vitrina que ofrece el contraste final entre esta entrega y su compañera.

Volviendo a esta comparativa entre filmes, creo que es importante hacer una salvedad y es que si bien los paralelismos que estudiamos antes son mas que palpables, las esencias son distintas… ambos son filmes que critican lo peor de una clase social sin dejarse nada de lado, pero también, un filme es triunfalista y el otro es fatalista, no solo en sus finales sino en el viaje de su protagonista ya que… uno se moviliza intentando cambiar las cosas, intentando perseverar y el otro se moviliza intentando simplemente sobrevivir a una vorágine muy compleja.

Con las calles de Paris y contrastes que solo los da la luz natural esta propuesta es tan vanguardista como el presupuesto lo permite. Les Cousins es definitivamente un gran cimiento que allanó todavía mas el camino a reconocer lo que aun era “la teoría del cine de autor”, la verdad es que de acá en mas todo se pondría mucho mejor para este cine experimental, pero habiendo llegado al final de lo que supe llamar Lado B, Les cousins es por merito propio un clásico de la Nouvelle Vague y una cinta que recomiendo como siempre 100%