La evolución de los sueños: películas que volvería a ver

Soy crítico de cine, ferviente admirador de Christopher Nolan, Steven Spielberg y fanático del cine psicológico y de ciencia ficción. ¿Querés charlar conmigo?

Cuando vi el desafío "Por qué la veo una y otra vez" en Peliplat, me di cuenta de que no podía elegir una sola película. Las películas que considero dignas de volver a ver cambian constantemente.

No es porque me aburra con facilidad o porque desprecie a las películas, al contrario, ocupan un lugar muy importante en mi corazón, son herramientas para construir sueños y reflejos de la realidad. A medida que crezco, mis sueños cinematográficos también evolucionan. Mirando hacia atrás, veo cómo mis exigencias y mi comprensión del cine cambian en las distintas etapas de mi vida. Aquí me gustaría compartirles las películas que me han acompañado a lo largo de las diferentes fases de mi vida y lo que significaron en esos momentos.

Sueños de la infancia

De niño, mis películas favoritas eran las franquicias de "Star wars" y "Jurassic park". Me dieron un sinfín de alegría y emoción; cuando las veía sentía que ingresaba a un mundo mágico. Recuerdo que siempre hacía que mis amigos y familiares las vieran conmigo, para poder recrear con ellos las escenas de batalla. Los duelos con sables de luz y las aventuras galácticas de "Star wars" hacían que mi corazón se acelerara. Fantaseaba con ser un valiente jedi y empuñaba un paraguas como si fuera un sable. Las persecuciones de dinosaurios y las luchas por la supervivencia en "Jurassic park" me daban descargas de adrenalina y despertaban en mí el miedo a lo desconocido.

Pero estas películas no sólo me alegraron, sino que también influyeron en mis sueños. En un momento, quería ser astrónomo para descubrir los profundos misterios del universo, o paleontólogo para desvelar los secretos de criaturas ancestrales. Las películas despertaron en mí el amor por la naturaleza y el deseo de explorar, llenándome de curiosidad y fascinación por el mundo.

Sueños de la adolescencia

En la secundaria, las películas de acción que antes me entusiasmaban empezaron a parecerme repetitivas y aburridas. Empecé a anhelar experiencias emocionales más complejas y profundas, y las películas románticas se convirtieron en mis nuevas favoritas, especialmente la serie "Antes…", que me conmovió muchísimo. "Antes del amanecer" cuenta la historia de Jesse y Celine, que se conocen en un tren y deciden pasar una noche juntos en Viena. Cada escena está llena de romance y poesía; pasean por las calles de Viena mientras hablan de la vida, el amor y los sueños.

Durante mi adolescencia, no tuve ninguna relación romántica y el matrimonio de mis padres distaba mucho de ser perfecto. Sin embargo, las historias de amor de esta serie me hicieron anhelar una relación. Las dos secuelas, "Antes del atardecer" y "Antes de la medianoche" (solo vi la tercera parte cuando era adulto, pero la incluiré aquí para concluir mi análisis), muestran el reencuentro de la pareja y el apoyo mutuo a lo largo de las distintas etapas de la vida. Cada vez que las veía me replanteaba mis puntos de vista sobre los objetivos del amor y la vida. Verlos discutir y reconciliarse en la mediana edad me ayudó a darme cuenta de que el amor no es sólo romance, sino también empatía y compromiso.

Sueños maduros

A medida que fui creciendo, mis gustos cinematográficos fueron cambiando de manera significativa. Ahora prefiero películas más sensatas y con un toque humano, como "Entre copas". Esta película cuenta la historia de dos amigos que viajan por la región vinícola de California, revelando las complejidades y frustraciones de la vida a través de detalles cotidianos. Cuando la veo siento que es una conversación con viejos amigos, que me hace reflexionar sobre mi vida y mis elecciones. Al observar a los protagonistas hablar de la vida en los viñedos, suelo sentirme absolutamente identificado con ellos: esos momentos aparentemente triviales de la vida encierran significados profundos. Cada vez que termino de mirarla, me siento obligado a replantearme mi vida y reflexionar sobre las definiciones de felicidad y éxito.

Sueños eternos

Por supuesto, algunas películas están en esta lista de forma permanente, independientemente de hace cuánto tiempo se estrenaron. La más importante es "Forrest Gump". Esta película me impactó de diferente manera en las diferentes etapas de mi vida. De niño, me encantaba la parte humorística; la inocencia de Forrest y sus aventuras me hacían reír a carcajadas. Al crecer, empecé a ver las historias emocionantes de los personajes secundarios detrás del humor. La lucha de Jenny, la desesperación del teniente Dan y la resistencia de su madre me conmovieron mucho. "Forrest Gump" no trata sólo de la leyenda personal de Forrest, sino que es una reveladora parábola sobre la vida, la perseverancia y el amor. Cada vez que la vuelvo a ver obtengo nuevos descubrimientos y experiencias emocionales, y por eso me sigue cautivando.

La evolución de los sueños

Las películas son herramientas para construir sueños y, con el paso de los años, los "sueños" que elegimos también evolucionan. De las aventuras y el heroísmo en la infancia al romance y las aspiraciones en la juventud, y luego a la realidad y la introspección en la edad adulta, los sueños cinematográficos en las distintas etapas de la vida reflejan nuestros cambios interiores. Sin embargo, algunas películas, no importa cuántas veces las veamos, siempre aportan nuevas percepciones y nueva fuerza en los distintos capítulos de nuestra vida.

En este mundo complejo y en constante cambio, las películas no son sólo un escape de la realidad; son espejos a través de los cuales nos examinamos y entendemos nuestra vida. Estos sueños cinematográficos han acompañado mi crecimiento y me han ayudado a encontrar mi verdadero yo en cada etapa de la vida. No importa cómo cambie el futuro, creo que estos sueños cinematográficos siempre estarán conmigo ya que se han convertido en una parte integral de mi vida.

¡Nos volveremos a ver para seguir debatiendo sobre películas!