Olvidar para recordar...

Eterno Resplandor de una mente sin recuerdos… ¿qué te dice eso? Para mí ya el título hace a esta película acreedora de ser considerada un clásico. Fue estrenada el año 2004 y protagonizada por Jim Carrey y Kate Winslet, quienes realizan una fabulosa y envolvente interpretación. La trama refiere a Joel (Carrey) como un hombre tímido y apático, quien decide hacer desaparecer todos los recuerdos que tiene de su expareja Clementine (Winslet) con un procedimiento médico, luego de saber que ella se sometió al mismo para borrarlo a él.

La eterna disyuntiva de tratar de evitar el destino y percatarse que éste ya tiene un camino trazado, transforma a esta película en una de las favoritas por el público para ser vista más de una vez, en mi caso, unas veinte veces. Está realizada de una manera llamativa y sugestiva, lo que genera que la observes sin aburrirte y que le encuentres un nuevo sentido cada vez que la repites. Es así, que vas descubriendo nuevos detalles, un ejemplo de esto, es el cambio de color del pelo de Clementine, que nos da pistas sobre el contexto.

Es importante destacar que a medida que avanza la película se hace visible la química entre los dos personajes principales, sus cuerpos y esencias se atraen siendo dos polos opuestos que se complementan en su totalidad. Cada uno de ellos con su identidad y personalidad muy marcadas, nos guían por su tormentosa relación, que a la vez nos muestra que son perfectos juntos. En este film, las personas que no son Clementine ni Joel, pasan a ser solo relleno, útiles para demostrar que los enamorados son el centro del universo, pues lo creas o no, hay parejas que están predestinadas

Para los amantes de los filmes románticos, esta cinta es una oda a todo lo que significa el amor, y a que independiente de la distancia física o mental que pueda existir entre dos personas, las conexiones existen. Expone además que en el amor puede existir dolor y angustia. Es una película que te muestra crudamente que no todo resulta fácil y que las personas no somos ideales, que las relaciones son construcciones, pero no siempre sobre cimientos estables.

La actuación de estos dos fantásticos actores traspasa la pantalla, siendo reconocidos con múltiples críticas positivas y además de nominaciones en varios festivales y premios. En cuanto a la película, en la entrega número 77 de los premios Óscar, fue merecedora del galardón al mejor guión original. Además, fue y sigue siendo, ubicada en las listas sobre las mejores películas de todos los tiempos entre los primeros lugares.

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Entonces, en resumen ¿por qué es una película que fácilmente te repetirías una y otra vez? Veamos. Por la trama original y sugestiva, por las actuaciones de Carrey y Winslet, porque nos permite hacer una introspección sobre si el destino es una fuerza que está sobre nuestras propias decisiones. Porque te deleitarás con el extraordinario escenario, porque tiene un trasfondo para reflexionar que por más estructurados que seamos o actuemos, no tenemos el control de los demás, ni de las situaciones. Porque se aplica a la vida misma, por los efectos y porque tendrás la oportunidad de conocer como funciona la mente.

Y tú ¿eliminarás a alguien de tus recuerdos si tuvieras la oportunidad?…