undefined_peliplat

Por otra oportunidad

Aunque aún no sale le daría sin lugar a dudas otra oportunidad a Hipo y Chimuelo quienes en la trilogía de Cómo entrenar a tú dragón nos entregaron una propuesta evolutiva desde todos los ángulos posibles: los escenarios, la vida en una aldea, una cultura como los Vikingos, las relaciones familiares y de amistad, el liderazgo, la responsabilidad, el orden natural, las creencias, prejuicios y presiones sociales así como indudablemente un cambio de mentalidad y pensamiento.

Cómo entrenar a tú dragón es una muestra de una pequeña dimensión del funcionamiento de nuestra sociedad en donde abundan personajes como Estoico el vasto y Valka quienes anclados a ideologías rígidas no se permiten ver más allá y se encuentran aislados en sus propias creencias llevando sus vidas y a quienes dependen de ellos por una sola línea llenos de miedos y frustraciones que bloquean su propio liderazgo y libertad, Bocón mejor amigo de Estoico, ese amigo que nunca falla porque siempre está ahí así estemos cometiendo errores prefiere cometerlos con nosotros que dejarnos solos pero que al mismo tiempo tiene esa habilidad de ser honesto y mostrarnos en qué estamos fallando, Astrid la chica rígida y siempre dispuesta a hacer lo correcto pero que al mismo tiempo tiene la apertura de ver, conocer y descubrir cosas nuevas, no es la clásica enamorada que hace todo por amor sino un personaje con una convicción y con la mente abierta, Brutilda, Brutacio, Patán y Patapez los cuates como se diría en México, los parces como se dice en Colombia no tan convencidos, pero arriesgados y dispuestos, los mini héroes rompe reglas siguiendo ciegamente a nuestro protagonista tan necesarios en nuestra vida cotidiana, por supuesto Hipo el “diferente”, el que “no encaja” que lo pone todo de cabeza y a gritos ahogados pide un cambio, lleno de miedos por la No aceptación que transforma en motivos para fortalecer su causa, que se empeña y finalmente en su terquedad y ambición logra mover ese anclaje mental a través del caos pero donde también debe pagar el precio de su “rebeldía” porque la vida siempre nos enseña de los dos extremos y mi favorito Chimuelo el inspirador, la causa noble por la que vale la pena luchar porque al mismo tiempo te enseñan, te motivan, no son estáticas, se mueven van y vienen y te empujan a dar lo mejor de ti mismo.

Es así como a través de las secuelas nuestros personajes y todo lo que les rodea va evolucionando partiendo de un cambio de pensamiento forzado por eventos externos o enemigos externos que finalmente son aquellos que se interponen en esa delgada línea entre el mundo que deseamos crear y el mundo que es, que se nos muestra, que se nos da, enseñándonos que los aprendizajes y las lecciones siempre están servidas en la mesa para quien las desea tomar, que el camino está lleno de fanáticos como Drago Manodura o Grimmel que se van a interponer en nuestras causas creando algunas veces un daño irreversible para sacar en este caso lo mejor de nuestros protagonistas y darnos cuenta algunas veces que el mundo no está preparado para lo que le queremos mostrar, que estamos un poco adelantados a lo que la sociedad necesita y debemos soltar con el fin de dar libertad a aquello que más amamos.

Al final de la tercera película Chimuelo y su familia se encuentran en el barco luego de muchos años con Hipo, Astrid y su familia revelando un noble vínculo que nos deja la preguntas ¿Ya estamos preparados?, ¿ahora sí los merecemos? o ¿solamente algunos están preparados?, ¿vale la pena volver? ¿Quién debería cambiar? o solo es cuestión de aceptación y continuar viviendo preguntas que valdría la pena abordar en una cuarta no creen?

Más recientes
Más populares

No hay comentarios,

¡sé la primera persona en comentar!

2
0
0