La Singular Vida de Ibelin
Benjamin Ree (2024)
El efecto mariposa, es una idea que nos dice que el pequeño aleteo de una mariposa puede causar una tormenta del otro lado del mundo. En el caso de la conducta humana, esta frase puede ser traducida a “no sabes el efecto que pueden tener tus acciones”, si bien esta frase pertenece a la teoría del caos, y se utiliza en un contexto negativo, yo creo que hay una vertiente positiva para esta teoría, un Ying para su Yang, pues si una acción puede llevar a la destrucción, también puede llevar a la creación, el crecimiento y la sanación. Una vida humana está llena de pequeñas decisiones, pequeños momentos en los que actuamos a veces por inercia, pero esos pequeños momentos pueden significar el mundo para quienes nos rodean.
Y actualmente, con la interconectividad que brindan los medios digitales, es cierto más que nunca que nuestro aleteo puede tener impacto del otro lado del mundo.
La singular vida de Ibelin es el nuevo documental de Netflix, un documental increíblemente conmovedor que nos cuenta la historia de Mats Steen, un joven de Noruega con una enfermedad muscular degenerativa. Mats, debido a su condición, pasaba mucho tiempo jugando juegos como World of Warcraft, a los ojos de sus padres, Mats era una persona aislada y solitaria, sin amigos ni pareja. Sin embargo, después del fallecimiento de su hijo se dan cuenta de que detrás de la pantalla había un mundo que no conocían, y había muchas personas que fueron impactadas por la amistad y el cariño de Mats o Ibelin como era su alias en el juego World of Warcraft.
El documental explora la vida digital de Mats a través de entrevistas y de los diálogos reales compartidos por texto dentro del juego, además, utilizando animaciones con los modelos del juego, logra recrear esta vida en una inmortalización de la misma.
La Satanización de los Videojuegos
Las generaciones más grandes están acostumbradas a tener cierto cuidado de los medios digitales, y con buena razón, pues es cierto que existen muchos riesgos dentro de este mundo. También se ha tendido a satanizar los videojuegos, ya sea por la violencia que muestran o por el aislamiento social que es tendencia en los gamers.
Solemos enfocarnos en ver lo negativo de estos y olvidamos que pueden tener grandes beneficios en la vida de las personas, olvidamos que a veces lo que vemos como retracción social puede ser otro tipo de socialización, una digital.
La comunicación, las dinámicas de interacción y las normas sociales, cambian a lo largo de los años, según el espacio y la cultura. Los videojuegos online son uno de los espacios de comunicación más prominentes de nuestra época, se han convertido en espacios ideales para la socialización, como antes eran por ejemplo los parques, en los que jóvenes compartían una misma actividad y trabajaban en equipo o competitivamente para en conjunto pasar el rato. Los videojuegos son exactamente la misma idea, solo que en vez de conocer gente cara a cara, es a través de una pantalla y puede ser que el goleador de tu equipo esté en un país cruzando el mar.
Por medio de los videojuegos, los jóvenes hacen amistades reales y a veces más genuinas y duraderas que las amistades convencionales a las que las generaciones mayores están acostumbrados, crean vínculos con personas de intereses afines y no necesitan saber cómo se ven o tener contacto físico con ellos jamás para saber que tienen alguien con quien pasar el rato del otro lado de la pantalla.
Una Vida Digital
Los padres de Mats cuentan que ellos temían que Mats jamás pudiera experimentar el amor, la amistad, servir a la sociedad, entre otras cosas. Temían que por su condición Mats se perdiera de la experiencia de vivir…
Pero Mats a pesar de su corta vida, logró experimentar eso y mucha más, y fue gracias a los videojuegos que Mats logró vivir una vida plena, llena de servicio, conexiones y fraternidad.
“No es una pantalla, es un portal hacia dondequiera que tu corazón deseé”
-Mats Steen.
A lo largo del documental nos cuentan cómo Mats era una persona muy sensible y que, con su empatía y buena escucha, hacía que las personas se sintieran bienvenidas. Lograba que sus amigos se sintieran apreciados a pesar de estar a miles de kilómetros de distancia. Mats ayudó a padres a reconectar y entender a sus hijos, ayudó a muchas personas a pasar por etapas difíciles y todo esto lo hizo con un mouse, un teclado y buena intención. Fueron tantas las aportaciones de Mats, aportaciones que no hizo con grandes movimientos sociales o grandes gestos, fueron pequeñas acciones a lo largo de una vida, pequeños aleteos que ahora gracias a este documental grabaron en la posteridad el nombre de Mats Steen “Ibelin”, y con él, queda grabado también su mensaje, un mensaje de comprensión, de romper la brecha generacional en cuanto a las nuevas formas de socialización, de no estigmatizar las discapacidades, pero sobre todo, de vivir.
Las Comunidades Digitales.
Una comunidad digital es un grupo de personas con un mismo interés que comparten un espacio digital. Cada comunidad es diferente y cada una tiene diferentes ideologías, normas sociales, etc. Existe una variedad gigantesca de comunidades en internet, aun dentro de un solo nicho existen diferentes subcomunidades cada una con su identidad.
Estas comunidades representan un lado de internet que aún no ha sido explorado a profundidad, y es el de la naturaleza sociocultural de las comunidades digitales, pues estas no solo tienen su identidad, sino que representan un sentido de pertenencia para las personas que forman parte de ellas, existen comunidades abiertas y cerradas, sociales, educativas, profesionales, etc. Algunas con características sumamente tóxicas y hasta riesgosas, pero muchas otras siendo refugios y hogares de muchos jóvenes que gracias a ellas encuentran un espacio ideal para relacionarse.
El documental explora la esencia de una de estas comunidades, aquella a la que pertenecía Ibelin, y desde su experiencia, nos muestra el tipo de relaciones que se pueden formar en estos medios. Podemos ver el desarrollo social entre estas personas reales, el crecimiento de la confianza entre ellos y el fortalecimiento de los vínculos con Mats, y al final somos conscientes de que estas amistades poco convencionales, eran realmente amigos, y las experiencias que Mats vivió con ellos no fueron un sustituto de la realidad, más bien, fueron una realidad en sí mismas.
“Vimos que eran personas genuinas que conocían a Mats muy bien- y quizá mejor que nosotros”
-Trude Steen
La singular vida de Ibelin, si bien es precisamente singular, no es una historia sensacional o increíble como suelen ser las historias narradas en otro tipo de documentales que cuentan historias reales que rayan en lo fantástico.
La historia de Ibelin es real, es pura, es aterrizada, pero jamás es simple, pues no hay nada de simple en una vida. Este documental es el registro de una vida digital, es la bella narración de una vida con todos sus altibajos, el documental dramatiza desde los diálogos reales en juego entre Mats y sus amigos, por lo que más que una dramatización es una representación tan fidedigna como puede ser, de todos esos gestos, y esos momentos que hacen de una vida digital, una no muy diferente a una vida real. Al final de este documental, uno puede apreciar diferentes aspectos que no había considerado sobre la discapacidad, los videojuegos y la vida en general.
Mats no ha sido la única persona en tener un fuerte impacto en una comunidad digital. El internet es inmenso, y cada persona ha tenido un impacto diferente y significativo dentro de este nuevo mundo lleno de dinámicas de interacción desconocidas para las generaciones pasadas. A la fecha seguimos relegando este tipo de relaciones a segundo plano, pero cada vez se están volviendo más comunes y no podemos evitarlas, en lugar de satanizar los videojuegos tenemos que enseñarles a las nuevas generaciones a usarlos con consciencia, enseñarles que hay muchas cosas buenas en el mundo digital, pero que también hay muchos peligros, y tenemos que brindarles las herramientas para protegerse de esos peligros, pero también brindarles las herramientas para que se desarrollen en el mundo digital si así lo desean.
Las acciones de Ibelin siguen siendo aleteos de mariposa, capaces de transformar la perspectiva de personas, y seguirá siendo una fuente de crecimiento social gracias a este documental tan humano, “La singular vida de Ibelin”.
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