Se que quizá para mucha gente va a ser muy reprobable mucho de lo que voy a escribir aquí, pero el amor que intercambias con ellos (las mascotas) es un tipo de sentimiento distinto al que puedes llegar a sentir con una persona y hasta superior en muchos sentidos, solo los que compartimos nuestro días con ellos, pueden comprender este tipo de sentimiento.
Un amuleto
Hay muchas experiencias que enriquecen la vida, pero una de las mejores indudablemente es dejar entrar a tu vida a otra persona, pocas cosas pueden ser más que enriquecedoras que eso, una de ellas es dejar entrar a tu vida a alguien que es aparentemente muy distinto a nosotros; es físicamente extraño, actúa a veces de manera impulsiva e impredecible, no habla tu mismo idioma y que a pesar de lo que muchos creen, te da y te enseña mucho más de lo que tu le puedas dar a el.
Mascota etimológicamente significa amuleto o cosa que sirve de talismán, o sea algo que aleja el mal y favorece el bien”. Creo que este significado es muy apropiado.
Una película que lleva esta experiencia a la pantalla de una forma muy respetuosa con el carácter de los perros y conmovedora para nosotros los humanos es Marley y yo; protagonizada por Owen Wilson (Jhon Grogan), Jennifer Aniston (Jenny Grogan) y Marley(22 labradores) dos talentosos actores, típicos de comedias ligeras, pero que no temen a burlarse de si mismos y que tampoco se amilanan para enfrentar escenas con una gran carga emotiva como en este filme.
Ésta película es encantadora, no será merecedora del podium en alfombras rojas y galas de premios, pero si le das la oportunidad se ganará tu corazón. Es una montaña rusa de emociones donde todo empieza riendo y terminas llorando. La historia nos expone en etapas de manera resumida lo que vivimos como resultado a la hora de decidir convivir en tu hogar con un ser de 4 patas, que también es un camión de pelos, goloso y de costumbres extrañas; como que no usa la poceta, lame y babea más de lo normal, se come tu medias, tu billetera o las patas de los muebles cuando se estresa (en vez de atiborrarse de helado de chocolate o comerse las uñas), un ser que siente pánico por los truenos o el estallido de la pólvora y se muestra como el ser más feliz del universo por el simple hecho de verte llegar a casa en las tardes.
La decisión de conseguir un perro, cuando nunca hemos tenido un verdadero amigo (el mejor amigo del hombre) o sea uno de estos amigos silenciosos que hablan con los ojos, lo hacemos casi siempre por un motivo práctico, como si fuese un objeto o una herramienta: ‘un regalo para el niño de la casa’, ‘para que acompañe a los viejos’, 'para que cuide la casa o la finca', etc. En el caso de la película, John lo usa como una distracción o un objeto de canalización del deseo de Jenny de ser madre en otra actividad, para ganar tiempo, pues aún no se siente preparado para ser padre y duda en sacrificar metas profesionales para dar paso a formar una familia.
A medida que avanza la película la pareja pasa por diferentes situaciones, algunas muy dramáticas como la perdida de un hijo, también se presentan problemas laborales, algunos momentos felices como la llegada de otros hijos y por supuesto los momentos divertidos, que los pone Marley mientras crece y se hace viejo.
Espectativas de vida
Un tema que no puedo dejar pasar y que tocan en la película son las espectativas de vida y como nos adaptamos a los cambios, una cosa es nuestro plan y otra lo que nos depara el destino, sin que esto signifique que el cambio de rumbo sea necesariamente decepcionante, quizá es mucho más valioso de lo que creemos merecer. Esto me hace recordar a Bastarden a la cual ya le hice una reseña anteriormente.
Jhon se debate en la duda de si está en el camino correcto o no. Sebastián es el mejor amigo de Jhon; un soltero empedernido que gracias a la libertad que le brinda su condición solitaria, le permite trabajar como reportero viajando, Jhon lo envidia (ese era su sueño) mientras se resigna a ser columnista y a su vida más «estable» en familia.
A medida que avanza la película vemos como John logra un desarrollo personal y como ser humano, mientras Sebastián se ve estancado; el galán macho alfa-chad que solía ser, se ha ido transformando en un personaje patético.
La amistad
La historia resume lo que significa compartir nuestra vida con un ser de otra especie que a pesar de las diferencias físicas y naturales, estas no son una barrera para crear un vínculo emocional con ellos. Una adoración mutua que hace que no solo los veamos como un miembro más de nuestra familia, si no como mucho mas, una parte fundamental de nuestra vida.
Al contemplar su estilo de vida, comprendemos muchas cosas de nosotros mismos, «son maestros que aprovechan su paso por esta tierra viviendo al máximo cada momento».
Un amigo para el cual no hay mejor actividad que pasar tiempo contigo.
Nuestra relación con ellos pasa también por etapas. Solemos tratarlos algunos como si fuesen hijos, pero esto es algo que lo pensamos por la diferencia de su ciclo de vida, que es más corto que el humano, llegan a nuestras vidas siendo bebés; ahí serían nuestros hijos, luego cuando son jóvenes o adultos podrían ser hermanos y cuando envejecen son como un padre o madre. Pero el concepto relacional que quizá más se desafía es el de la amistad; tenemos la idea que esta se basa en la igualdad, pero que la obra cumbre sobre la amistad que es el Quijote también contradice ésta creencia.
Y volveríamos a la idea inicial de que las apariencias engañan y no somos tan distintos como aparentemente parecemos.
Esa tristeza desbordada que muestran cuando salimos de casa, me hace pensar que el vínculo es tan fuerte que he llegado a imaginar que ellos creen somos una parte casi física de ellos como una de sus orejas o su cola.
Solemos decir que las mascotas no hablan, pero que equivocados estamos, sí los hacen sino que la comunicación con nosotros se basa en otro tipo de lenguaje.
Vivir el presente.
En ocasiones podemos llegar a reírnos de sus actitudes extrañas, como cuando se persiguen la cola.
Nos mantenemos tan embotados en nuestras ocupaciones, rutinas, compromisos y deberes que no nos queda tiempo para razonar o analizar al otro. Esto es algo que ellos nos enseñan, mientras el ser humano esta metido en un maratón sin fin persiguiendo, metas proyectos, añorando el pasado y preocupados constantemente por el futuro, ellos a lo sumo persiguen al gato del vecino o su propia cola. Pero podemos detenernos a pensar ¿que es más absurdo; nuestro estilo de vida abstracto y complicado o su manera
Ellos no necesitan hablar, cuando sus ojos se fijan en ti. Te están viendo desde el corazón, te ven con todo su ser, como hipnotizados su mirada te lo dice todo.
La muerte
Al final llega esa separación inevitable que esperamos o predecimos al ver que Marley va envejeciendo. Llega ese difícil momento en el que la eutanasia; “—dormirlo” porque ya su estado de salud es tan precario, que lo que poco que se puede hacer por el, se reduce a una muerte por compasión.
En el momento del entierro las palabras que dicen los miembros de la familia son muy emotivas, sobre todo las de Jenny quizá por cierto remordimiento pues desde un principio fue la que más trato de mantener cierta distancia y la que llegó a perder la paciencia con el en un momento de la película.
Ese momento desgarrador que nos hace llorar y lanzar suspiros ahogados, es nuestro cuerpo queriendo derribar el muro que nos separa de la muerte pero al no poder hacerlo nos desgarramos por dentro.
Si tienes una mascota en tu casa seguro que sabes lo qué significa tener un ser vivo que te acompaña en el día a día y lo puedes resumir con dos palabras “amor incondicional”.
Como meterse en un bucle o en una paradoja.
Escribir este artículo es un ejercicio gratificante porque dedicar a estos amigos; lo que sea; un minuto de tu tiempo, una caricia, unas palabras empalagosas: —ay eshe peguito tan dindo! es un honor, una experiencia en si misma gratificante.
Escribir este artículo es especial porque no solo me conmueve, sino que me hace sentir como si fuese el personaje que interpreta Owen Wilson (Jhon Grogan) que en la ficción es un periodista que escribe un artículo para un periódico sobre sus aventuras con Marley y lo que significa tener un perro y como esta experiencia cambia su vida.
Un artículo de una película con temática «perruna» sobre un escritor que publica a la vez artículos hacerca de perros.
Como 'las mil una noches' que son historias dentro de las historias y generan esa sensación de infinito dónde el tiempo como lo concebimos es algo secundario y la conciencia de vida y su realidad cobran mayor importancia. Y cuando hablamos de amor sincero, inmortalidad o la misma muerte, pensamos en cosas que son inconmensurables; como el cielo, el universo o las estrellas.
Dato curioso: la película está basada en el Libro Marley & Me escrito por el periodista americano John Grogan.
En resúmen un perro o una mascota en tu vida, es muchas cosas: primero que todo; es es amor, segundo; por su corto ciclo de vida y sus edades; es un hijo, un hermano, un padre, un abuelo, pero también es un amuleto, un amigo, un maestro, por su muerte temprana es un sacrificio y por ende un vínculo con el más allá, también es un secreto por su silencio, pues no podemos preguntarle; ¿cómo nos ve el a nosotros? Se me ha ocurrido en ocasiones que nos ven como dioses, pero creo que un concepto que encaja mejor es el de pastor. El humano siendo un protector y el perro un guardian.
(Soy anticlerical y aborrezco mucho a las religiones en general, Cuando escucho en templos la repetición de lecturas de manera mecánica y con voces horribles, las palabras leídas pierden su sentido, cuando leemos los escritos toman otra connotación más íntima, logramos entender y encontramos un consuelo).
« 23 El Señor es mi pastor, nada me falta;
en verdes pastos me hace descansar.(Eutanasia)
Junto a tranquilas aguas me conduce;
Me infunde la vida.
Me dirige por caminos de justicia
En honor a su nombre.
Aunque yo camine
En el valle de la sombra de la muerte
No temeré ningún mal
Pues tu vienes conmigo.
Tu vara y tu callado me consuelan».
Salmo 23
Este análisis en memoria de mi amiga Noa.
Les dejo otras 3 películas recomendables que seguro también logran sacarte una lágrima:
Bonus: Robot Salvaje aunque no es de perros también habla de la maternidad, de crecer y de la amistad y por supuesto también hace llorar, y bastante.
Escrito por Mario Morales
A las 2:22 (GMT-4) del 3 de enero de 2025
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