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Ah, los Premios Oscar 2025, esa noche en la que Hollywood saca sus mejores galas y sus peores decisiones. Este año no fue la excepción, con sorpresas que dejaron a más de uno boquiabierto y frustraciones que hicieron que otros quisieran lanzar la televisión por la ventana. Pero vamos por partes, como dijo Jack el Destripador.
Lo más esperado: "Anora" arrasa en la gala
La gran triunfadora de la noche fue "Anora", la comedia dramática de Sean Baker que se llevó cinco estatuillas, incluyendo Mejor Película, Dirección, Guion Original, Montaje y Mejor Actriz Protagonista para Mikey Madison.
La película, que muchos describen como la anti "Pretty Woman", aborda la vida de una stripper en Nueva York con una frescura y realismo que conquistó a la Academia. Era previsible que una producción independiente y con un enfoque tan humano destacara en una gala que, en los últimos años, ha buscado reivindicar historias más auténticas y menos glamorosas.
Lo menos esperado: "Emilia Pérez" se queda con las manos vacías
Si alguien apostó a que "Emilia Pérez" sería la gran vencedora de la noche, perdió hasta la camisa. Con 13 nominaciones, la película dirigida por Jacques Audiard solo consiguió dos premios menores.
La cinta, que pretendía ser una representación de la cultura mexicana, fue duramente criticada por la ausencia de mexicanos en su producción y por perpetuar clichés y prejuicios.
Parece que la Academia decidió darle la espalda a una película que, aunque tenía buenas intenciones, no supo ejecutar de manera adecuada su propuesta.
El papel del anfitrión: Conan O'Brien y su humor afilado
Conan O'Brien fue el maestro de ceremonias de la noche, y como era de esperar, no dejó títere con cabeza. Su monólogo inicial estuvo lleno de bromas mordaces, incluyendo algunas dirigidas a la polémica en torno a "Emilia Pérez" y su protagonista, Karla Sofía Gascón. O'Brien comentó: "Karla, si publicas algo sobre los Oscars esta noche, mi nombre es Jimmy Kimmel".
Además, no perdió la oportunidad de señalar la vestimenta informal de Adam Sandler, lo que desencadenó uno de los momentos más comentados de la noche.
El momento de tensión con Adam Sandler: ¿Moda o falta de respeto?
Y hablando de Adam Sandler, el actor decidió asistir a la gala con su característico estilo desenfadado: sudadera con capucha y pantalones cortos. Durante el monólogo de apertura, Conan O'Brien no pudo evitar bromear al respecto, diciendo que Sandler parecía alguien que juega al póker en línea a las dos de la mañana.
Sandler, lejos de sentirse ofendido, respondió con su humor habitual, defendiendo su atuendo y protagonizando un intercambio que muchos interpretaron como una sátira política hacia recientes encuentros diplomáticos.
Este episodio dejó en evidencia la tensión entre las expectativas de etiqueta en eventos de este calibre y la personalidad auténtica de algunos artistas.
Otras sorpresas y frustraciones de la noche
La ceremonia también estuvo marcada por otros momentos inesperados. El "In Memoriam" olvidó mencionar a figuras recientemente fallecidas, lo que generó críticas en las redes sociales. Además, la cuenta oficial de los Oscars confundió al músico Benny Blanco con Bad Bunny, un error que no pasó desapercibido para los internautas.
Por otro lado, la reacción de Elton John al perder el Oscar a Mejor Canción Original ante "Emilia Pérez" fue uno de los momentos más comentados, mostrando que incluso las leyendas pueden sorprenderse en estas galas.
Conclusión: Una gala para recordar (o no)
Los Premios Oscar 2025 nos dejaron una mezcla de emociones. Desde la consagración de "Anora" y la reivindicación del cine independiente, hasta las polémicas en torno a "Emilia Pérez" y las decisiones de vestuario de Adam Sandler. Conan O'Brien supo llevar la gala con su humor ácido, recordándonos que, al final del día, Hollywood es un espectáculo donde lo inesperado siempre tiene un lugar reservado. Y aunque algunos se fueron a casa con una estatuilla y otros con las manos vacías, lo cierto es que esta edición de los Oscars será recordada por sus sorpresas, frustraciones y momentos que nos hicieron reír, reflexionar y, sobre todo, entretenernos.
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