Better Man: O el mejor biopic de un cantante de este siglo?

Puede que sea tarde, dado que se estrenó hace unos meses, pero quería dejar escrita mi opinión sincera sobre esta película con la que me lleve una grata sorpresa.

Para empezar, no me interesé cuando vi por primera vez el tráiler. El hecho de que Robbie Williams fuera representado por un chimpancé me espantó y de seguro a muchos otros también. Además, creía que este género no estaba mostrando mucho progreso en los últimos años. A veces blanqueando la imagen del ídolo o incluso inventando otra historia. Pero esta no hace eso…

Previamente mencioné que para el papel del señor Williams decidieron que alguien actué con captura de movimiento. Esto ya de por sí mismo rompe el hielo. Un director con una propuesta atrevida. Lo siguiente, era aprovechar esta herramienta al máximo.

Michael Gracey, el director de El Gran Showman, vuelve a hacer un musical cuyas coreografías y escenificación son imaginativas y excelentes. Simplemente, el primero ya era suficiente para enganchar y sentar las bases. Además, hace una obra superior, en mi opinión. ¿Y qué la hace tan única? Porque hay corazón, un personaje con el cual podemos identificarnos. Y el director nos lleva a través del callejón de memorias de Robert, donde nos internamos en las sombras y vemos sus demonios. Algo que también debo remarcar es la selección de canciones en los números musicales. Ya que cada una va acorde a un sentimiento que lleva Robbie alrededor del filme. En verdad nuestro protagonista se sincera con nosotros, afirmando que es un humano que cometió muchos errores y pasó por sus altos y bajos. Y aunque a pesar de lo terrible que se sentía por dentro, logró salvarse y recuperar las riendas de su vida.

En resumen, me pareció una película muy entretenida, inspiradora y emotiva que recomiendo a cualquiera, incluso si no eres fan de Robbie Williams. Ésta no dejará indiferente.