Riggs llega al depósito y luego secuestra a la fuerza a las tres niñas y las aleja de la madre de Molly como algo inquietante.
Molly ve a un niño llorando en el cobertizo de confinamiento solitario en el Asentamiento.
Las chicas se esconden y tratan de permanecer quietas y en silencio mientras el rastreador pasa cerca de ellas.
Las chicas intentan esconderse del rastreador y de otros que han llegado y están bastante cerca de ellas.
Varios hombres persiguen a Gracie y la atrapan, la meten en un automóvil para llevarla de regreso al Asentamiento.
Molly y Daisy se arrastran por el árido desierto y finalmente se derrumban en él.
Riggs se abre camino lentamente (con un rifle) por las noches para tratar de averiguar qué están haciendo las mujeres aborígenes cuando la madre de Molly se interpone en su camino y luego levanta un palo afilado como una lanza. Eso lo hace detenerse y luego huir.