'Vidas pasadas': Una película conmovedora

"Vidas pasadas" surgió como la película destacada en el 73º Festival de Cine de Berlín, donde recibió la aclamación generalizada de casi 200 críticos de cine profesionales. Con una impresionante calificación del 97% en Rotten Tomatoes y una puntuación estelar de 94 en Metacritic, se ha convertido en una de las películas mejor puntuadas del año. Lo que hace que este logro sea aún más notable es el hecho de este no es ni más ni menos que el DEBUT de Song como directora. La película ahonda en las sutilezas del romance asiático, capturando los corazones tanto del público como de los críticos por igual. En este artículo, exploraremos las razones detrás de su encanto innegable.

En términos generales, las primeras obras de los directores suelen estar estrechamente relacionadas con sus propias experiencias, y sin dudas este es el caso con Celine Song y "Vidas pasadas". Celine es una canadiense de origen coreano que vive en Estados Unidos. Nacida en Corea, emigró a Canadá a la edad de 12 años con su familia y se mudó a Nueva York en sus 20. Obtuvo un título en escritura teatral de la Universidad de Columbia y trabajó en el teatro mientras preparaba el guion para la película "Vidas pasadas". La experiencia de viajar por muchos países también dio a Celine Song una inspiración única, e integró su sentido de identidad en la película, brindándonos una historia de "triángulo amoroso" que contiene rasgos tanto asiáticos como europeos.

Al principio de la película, la directora presentó a tres personajes principales, dos hombres y una mujer estaban sentados en un bar de Nueva York a las 4:00 de la mañana. Nora (Greta Lee) y Hae Sung (Teo Yoo) estaban conversando muy alegremente. Mientras tanto, el esposo estadounidense de Nora, Arthur (John Magaro), estaba sentado allí en silencio e incómodo. Durante este momento, alguien preguntó, "¿Cuál crees que es la relación entre los tres?" aludiendo sutilmente al tema de la película. En una entrevista, la directora aclaró que la película no se centra en la típica narrativa del "triángulo amoroso". En cambio, profundiza en temas de amor y elecciones de vida.

Por ejemplo, en la película, Nora habla sobre un concepto oriental: el karma. A los ojos de los asiáticos, algunas personas están destinadas a conocerse, con un amor tan fuerte y verdadero que puede perdurar durante varias generaciones, incluso si se han perdido en el pasado. El karma, palabra originaria del budismo, arraigó en los corazones de los directores y otros asiáticos, y gradualmente se convirtió en sinónimo de amor. Siempre que nos enamoramos de alguien, usamos "karma" para racionalizar la relación, y siempre que caemos en la dificultad emocional, también usamos "karma inapropiado" para reconfortarnos. En la película, la directora utilizó hábilmente diferentes concepciones de "karma" para romantizar los lamentos en las relaciones. Además, también trató el sentido de “identidad” en la película. Los enamorados de la infancia, destinados a estar juntos, vieron cambiada su trayectoria de vida porque tuvieron que emigrar con sus padres. De hecho, Nora visualizó sus sentimientos de identidad cultural, nostalgia y pertenencia en Hae Sung. El trágico final entre los dos también muestra que Nora, como descendiente de inmigrantes, no pudo deshacerse de tales lamentos durante toda su vida e incluso transmitiría este sentimiento incómodo de identidad cultural a sus hijos.

No solo "Vidas pasadas" buscó centrarse de manera apasionada en explorar temas relacionados con la identidad y el multiculturalismo en los últimos años, A24, la faomsa productora, también ha estado ahondando en este tema. La empresa ha dado grandes pasos en el análisis de la cultura asiática. Esta exploración abarca desde la deconstrucción de las dinámicas familiares orientales y occidentales en "Entre ellas", hasta la representación matizada de conflictos culturales dentro de familias inmigrantes en "Minari", y profundiza aún más en el amor maternal asiático con efectos especiales cautivadores en "Todo en todas partes al mismo tiempo". El enfoque de A24 no es abarcar todo, sino proporcionar numerosos aspectos destacados e intricados que demandan tu atención.

Volviendo a "Vidas pasadas", sin duda es una película romántica delicadamente elaborada, pero tiene sus limitaciones. Al ser una obra autobiográfica, la trama podría parecer algo básica. Si los espectadores no comparten una experiencia similar con la protagonista, podría resultarles desafiante conectarse emocionalmente con ella. Además, aquellos en la audiencia que luchan contra la "misofobia de las relaciones" podrían encontrar a la protagonista desconcertante. No solo anhela el amor incondicional de su esposo, sino que también se ve obses spués, solo se encontrarán atrapados en un ciclo de arrepentimiento.

Si tienes gusto por historias de amor intrincadas, "Vidas Pasadas" es una película que vale la pena ver. La determinación y la resistencia ocultas detrás de la lente de la cámara podrían despertar tu simpatía.