Es cierto que el hoyo 1 terminó con un final abierto, muy sorprendente en el aspecto interpretativo, metafórico, y por supuesto, simbólico. Pero, en este artículo, aprovecho para analizar el final de su recién estrenada secuela, la cual tiene un elemento sorpresa antes de abordar el final.
Durante la mayor parte de la película, parece que es propiamente una secuela, donde reina un orden establecido inspirado por el protagonista de la primera película, quien parece haber sido tomado como un mesías por los habitantes del hoyo, un mártir que buscaba el orden y la justicia. Sin embargo, el golpe sorpresivo es la aparición de Trimagasi, con un aspecto más joven, que da a entender que la película es en realidad una precuela.
Luego de los acontecimientos de la protagonista en su intento por escapar del hoyo, surge una escena similar a la de la primera entrega, con un niño, que resulta ser una manifestación de los remordimientos de la protagonista, quien al parecer falló en su intento de escape, y termina descendiendo hasta el último piso del hoyo, como una referencia al infierno de Dante, al final, terminan en un sitio similar al limbo, es ahí donde el final comienza su construcción, más explicativa sobre la conexión entre ambas películas, cuando se revive el final de la primera parte, y es que, al mismo tiempo, ambos protagonistas se encuentran, y tienen una historia en común. El final aun queda abierto a interpretación, pero es fácil asumir que el protagonista de la primera parte es el ex novio de la protagonista de la segunda parte.
El niño en esta ocasión refleja en la protagonista el martirio por aquel otro niño que murió en un accidente y por el cual ella se culpa, considero que hay varios elementos interpretativos más, ya que la película no está sujeta a una sola visión, sino a una amplia percepción de la realidad, véase como el personaje de Dagin Babi representa a la justicia, severa, pero justa, es una tiranía, pero sorprendentemente es justa, entonces es inevitable explorar el grado de rigidez en la justicia, y llegar a la conclusión de que la justicia siempre será justa, por eso es cuestión de los mismos hombres oponerse a ella cuando sea demasiado justa, esa es la verdadera revolución. Es sin duda una película que nos deja una rica enseñanza reflexiva, sobre los valores que rigen nuestro desenvolvimiento.
Lo sorprendente es como van construyendo una historia a través de mensajes poderosos y crudos, es una forma de mezclar la naturaleza primitiva humana, con la realidad evolutiva de nuestra sociedad, es decir la coexistencia entre el hombre-bestia y sus ideales más elevados. La justicia en su máximo esplendor, incluso bajo ciertas circunstancias la justicia no parece justa.
Es igualmente interesante, que si no fue el protagonista de la primera el que inspiro el orden del hoyo, ¿quién fue entonces el hidalgo que mencionan como mártir?
Las acciones van dirigidas a realizar una tercera película, sin embargo, no deja de ser un final fascinante.