2001: Odisea del Espacio y Wall-E, tienen más en común de lo que crees Spoilers

Wall-E (2008) fue mi primer acercamiento al género de ciencia ficción cuado era niño, aún sigue siendo una de mis películas favoritas de Pixar (a veces me pregunto si la mejor del estudio), años después vi 2001: Odisea del Espacio (1968), justo me había introducido al cine de Stanley Kubrick, además ya era fan de la ciencia ficción clásica (incluyendo Star Wars), ahí pude entender muchas referencias, al inicio de ambas películas, no contienen nada de diálogo (si ignoramos el uso de hologramas al principio de Wall-E) hasta que salieron de la Tierra, la ausencia de diálogo es algo inusual en una película de animación dirigida hacia un público familiar, también es una forma de retornar al cine mudo (les recuerdo que los animadores de Pixar vieron películas de Charles Chaplin, Buster Keaton y Harold Lloyd, para ver como debia actuar Wall-E), en ambas películas, los personajes encuentran objetos que desencandenarán los sucesos que habrán de ocurrir en la trama, en 2001, los homínidos son despertados por el Monolito, y uno de ellos (Moonwatcher) ve la utilidad del hueso como una herramienta, para ayuda, autodefensa y destrucción, ya que éste mata a uno de sus compañeros, su propia especie. Mientras tanto, Wall-E es una historia más positiva, nuestro protagonista encuentra una planta, demostrando que la vida en la Tierra aún es capaz de prosperar, después una nave aterriza en la superficie terrestre, revelando a un robot blanco de lineas elegantes y forma ovalada, EVA, al igual que el Monolito, ha venido a un cierto punto de la historia, en el futuro distante, el Monolito se ha presentado en distintos momentos de la historia humana desde el inicio, mientras que EVA ha venido a ver el estado de un planeta abandonado por su propia especie, aunque tampoco es la única sonda que ha sido enviada a revisar la Tierra.Wall-E: educar en salud y valores - Proyecto SENDO

El uso piezas clásicas como Así Habló Zaratustra de Richard Strauss o el vals del Danubio Azúl de Johann Strauss II, también se encuentran en Wall-E a manera de homenaje, el personaje de AUTO, el piloto automático de la nave Axioma, cuyo ojo rojo es tomado de HAL 9000, la super computadora que opera en el Discovery 1, ambos son inteligencias artificiales, con órdenes de llevar a la civilización humana a nuevos mundos, y que de repente desobedecen las órdenes de sus tripulantes (si bien AUTO nunca llega a acabar con vidas humanas), al ver las intenciones que estos tienen, ya que “no cumplen con su función”, hasta que el Capitán, en un acto heróico al igual que Dave Bowman, deciden desactivar a AUTO, al compás de la música de Richard Strauss. Acto seguido, Dave y el Capitán tendrán un viaje astral hacia su nuevo destino, aquí es donde Andrew Stamton difiere de Kubrick, entre tanto, en 2001, el destino del protagonista es Júpiter “y más allá”, en Wall-E vemos como la raza humana regresa a la Tierra, para enmendar las cosas e iniciar de nuevo, un mundo donde confluya la tecnología, la naturaleza y el progreso humano, por el contrario en el filme de Kubrick, vemos el último paso de la evolución humana (el “niño de las estrellas”) listo para retornar a la Tierra, como un ser sobrehumano (¿un superhombre?), terminando en una nota más ambigua que el final feliz del filme de Pixar.

HAL From '2001: A Space Odyssey' Still Has Very Contemporary Lessons for Us
Escena de 2001: Odisea del Espacio (1968), Dave Bowman desactiva a HAL 9000

Es considerable pensar que una máquina pudiera ser igual de humana que nosotros, algo que es puede apreciar en Wall-E con el trato hacia EVA y hacia otros, no solo los robots, sino con los mismos humanos, algo que muchos llegan a cuestionar sobre HAL 9000, estas inteligencias artificiales responden a una mala programación, y es donde recae la importancia de la responsabilidad humana ante el manejo de la tecnología.

LIGHT

Ilumina y aumenta su visibilidad — ¡sé el primero!

Comentarios
Tendencias
Novedades
comments

¡Comparte lo que piensas!

Sé la primera persona en comenzar una conversación.